El tenista alicantino David Ferrer, número siete del mundo, aseguró ayer que es vital lograr «cambios» en el tenis español y llegar «a la mejor solución posible», solo unas horas después de que los tenistas del país se uniesen a través de un comunicado pidiendo una solución urgente al «liderazgo caótico y beligerante» de Escañuela.
«Lo que existe es descontento por parte de todos los jugadores y del tenis en general, tanto masculino como femenino, por la gestión de la Federación. Lo que buscamos con el escrito son cambios y llegar a la mejor solución posible», declaró en el programa Tiempo de Juego de la Cope.
Además, el alicantino, que no va a participar en Wimbledon por una lesión en su codo derecho, es consciente de que esos cambios tienen que ser profundos. «No todo se soluciona si José Luis Escañuela deja de ser presidente de la Federación Española de Tenis. Todo es reconducible, pero la gestión no ha sido la más adecuada. Mostramos nuestro descontento por cómo se están haciendo las cosas en estos últimos años», indicó.
Sin embargo, el de Xàbia también es autocrítico. «La imagen que estamos dando no es la mejor. Los jugadores también tenemos que asumir nuestra parte de culpa y somos conscientes de ello pero esta imagen no ayuda a conseguir sponsors ni a que se apueste por el tenis. Además, perjudica a la escuela base y no es bueno para el futuro», subrayó.
Por otra parte, valoró la carta conjunta que los tenistas españoles firmaron el domingo después de la reunión que mantuvieron en Wimbledon ante «el deterioro y la situación actual» de este deporte en España, en la cual mostraron su alarma y la necesidad de encontrar solución ante el «liderazgo caótico y beligerante» de José Luis Escañuela, presidente de la RFET.
«Hemos medido las palabras en el comunicado porque no nos gusta ir de duros. Siempre intento razonar y pensar la manera de actuar lo mejor posible y luego intentar que la otra persona razone y actúe de la manera coherente. Es un tema muy complejo y hay que ser cautos y hacer las cosas bien», explicó el alicantino.
Por último, habló de la capitana de Copa Davis, Gala León, de la que aseguró no tener «nada en contra». «Cada uno tiene su trabajo y lo puede hacer mejor o peor. En Copa Davis se podrían haber hecho las cosas mejor, pero no es una situación fácil. Me da pena que esto se haya convertido en un show mediático y no se haya podido resolver internamente. Los dirigentes han dicho cosas en la prensa que no han ayudado y que han provocado este distanciamiento. Eso es lo que más me duele», afirmó.
Las declaraciones de Ferrer llegan después de que el domingo la capitana de Copa Davis, Gala León, dimitiera de su cargo tras las declaraciones de Nadal en las que lamentaba «el show mediático» de la Federación, una dimisión que no ha sido aceptada por Escañuela ni por la presidenta en funciones de la RFET, Olvido Aguilera. Gala León presentó su dimisión unas horas después de que Nadal lamentase el espectáculo que está protagonizando el tenis español.
