El Tribunal del Deporte de la Comunidad Valenciana estima parcialmente la sanción de diez meses que impuso el Comité de Competición, el pasado mes de abril, al técnico monovero Ernesto Rodríguez «Rodri».

La sanción, según el Comité de Competición, fue porque Rodri «insultó, zarandeó y agredió» al árbitro alicantino Rubén Campo Hernández al acabar el partido de Liga de Primera Regional entre el Monóvar y el Dolores (0-0).

El propio Rodri aseguró en su día que iba a recurrir «hasta el final, bien a nivel federativo o jurídico, ya que el árbitro falseó la realidad de los hechos».

Días después, el club monovero, que preside actualmente Marcial Picó, puso el caso en manos del letrado Manuel Guill Crespo, expresidente del Eldense, quien presentó recurso ante el Comité de Apelación, el cual ratificó la sanción al monovero Rodri.

El Monóvar, a través de su abogado, presentó un último recurso al Tribunal del Deporte, que es quien ha paralizado la sanción hasta que se resuelva la querella criminal que impuso el Monóvar al colegiado, por lo que el veredicto final se conocerá cuando se celebre la vista de dicha querella.