La delegación del Bayern Múnich tuvo que desalojar el hotel en el que acababa de quedar concentrado en Moscú, donde se enfrentará el martes al CSKA en la segunda jornada de la Liga de Campeones, al saltar la alarma de incendios.

Jugadores, el cuerpo técnico encabezado por Pep Guardiola, y directivos, acababan de llegar al lugar de alojamiento en la capital rusa cuando saltó la alarma y se vieron obligados a salir del lujoso Ritz Carlton y a permanecer fuera de la instalación, a un par de manzanas de distancia, informó el club germano.

Una vez solucionado el problema por parte del personal del hotel, toda la delegación del Bayern pudo regresar al hotel con normalidad y a alojarse en las habitaciones.

El incidente no pasó de anécdota y la mayoría se lo tomaron con buen humor y tranquilidad. El portavoz del Bayern, Markus Horwick, encontró una anécdota en el suceso y confirmó que los jugadores podrán "dormir una hora más" este domingo para descansar en condiciones antes del entreno de este lunes. "Será una recompensa a la agitada noche", añadió con una sonrisa.