El 13 de noviembre de 2011 es una jornada histórica para el deporte alicantino. Ese día el alcoyano Nico Terol se proclamó campeón del mundo de 125 cc. Veinticuatro horas después Alcoy salió a la calle y le tributó un recibimiento que el piloto difícilmente olvidará mientras viva. Fue recibido en el Ayuntamiento por el consistorio al completo y tuvo que salir a saludar desde el balcón de la Casa Consistorial a los numerosos aficionados que no paraban de aclamarle. Fue un triunfo no solo de la afición alcoyana y alicantina, sino de la de toda la Comunidad Valenciana. Había hambre de títulos, ya que no se celebraba ninguno desde 1989, año en que Manolo Champi Herreros conseguía el de 80 cc.

Hoy, tres años y nueve meses después, tras el Gran Premio de la República Checa de Moto2 el piloto abandona momentáneamente el Mundial y está sin moto tras haber roto las relaciones con su equipo. Pese a que desde ambas partes se ha querido maquillar aduciendo unos problemas físicos, la realidad es que se han roto las relaciones de mutuo acuerdo tras duras negociaciones. Nico tenía con el equipo Aspar un contrato blindado según el cual no se le podía despedir por bajo rendimiento, pero la falta de resultados había vuelto la situación insostenible para ambas partes. Esta cláusula era un freno par el expiloto de Alzira que ha convertido su equipo en una máquina de triturar pilotos, ya que aduciendo siempre el mismo motivo, en un pasado reciente, ha despedido a Xavi Forés en 2011 y en 2012 a Toni Elías, Alberto Moncayo y Héctor Faubel.

A Nico, tras ser campeón le quedaba un año de contrato y dio el salto a Moto2. La temporada 2012 fue desastrosa y sus mejores resultados fueron dos decimosegundas posiciones en Brno y Motorland, aunque en el último GP hizo concebir esperanzas al ser tercero en el Ricardo Tormo de Cheste. Pese a estos resultados el piloto cotizaba al alza y le llegaban ofertas de los mejores equipos; y cuando todo el mundo esperaba un cambio de aires, muy mal asesorado, decidió renovar por su equipo.

El curso de 2013 no empezó mejor que el año anterior y en Catar solo pudo ser decimocuarto, pero en la siguiente carrera en el Circuito de Austin reverdeció laureles y consiguió la victoria. La temporada no fue mala pero sí sumamente irregular, lo que motivó que muy pronto perdiese todas las opciones al título. Así y todo, logró ganar también en Motorland Aragón y Ricardo Tormo de Cheste, siendo segundo en el circuito italiano de Mugello.

La actual temporada la empezó con la vitola de favorito al título y finalmente se ha convertido en la peor de su carrera deportiva, en la que tras once GP disputados tan solo logró puntuar en Argentina al cruzar la meta en decimocuarta posición.

Seguramente Terol no volverá a competir este año pero es de esperar verlo de nuevo en la pista la próxima temporada. El motociclismo español no puede permitirse el lujo de tener inactivo a un piloto que con una moto competitiva y en un equipo en que las cosas funcionen correctamente lo más normal es que acabe todas las carreras entre los cinco primeros clasificados.