El futuro jugador del Real Madrid, James Rodríguez, fue ayer la gran gran atracción en el aeropuerto Adolfo Suárez Madrid-Barajas. El centrocampista colombiano hizo ayer al mediodía una escala en Madrid en su viaje hacia Niza y sacó algunas fotos con aficionados que estaban en el aeropuerto. De allí, va a reincorporarse a la concentración del Mónaco, su actual club. De todas formas, se sabe que el colombiano está muy cerca de fichar por el Real Madrid.

La presencia de James en Madrid desató la euforia de los numerosos pasajeros que a esa hora estaban en Barajas. Todo el mundo quería una foto suya. James ya se había hecho numerosas fotografías en pleno vuelo con varios niños que le reconocieron, a los que firmó autógrafos en varias camisetas de la selección de Colombia.

Al aterrizar en Madrid, varios aficionados quisieron posar con el máximo goleador del Mundial mientras cambiaba de avión, y varias de esas finstantáneas fueron compartidas en las redes sociales.

El colombiano ya le ha dicho al Mónaco que no quiere disputar ni un minuto con la camiseta monegasca durante esta pretemporada y que su intención es jugar en el Real Madrid las próximas campañas.

James está convocado por el Mónaco para que se incorporara hoy a la concentración de su equipo en Miami, donde disputará el próximo miércoles un encuentro amistoso ante el Atlético Nacional.

La idea es que no viaje y espere en Mónaco a cerrar su fichaje por el Madrid para ser presen en el Santiago Bernabéu por el presidente Florentino Pérez.