El serbio Novak Djokovic, primer cabeza de serie en Wimbledon, remontó hoy dos sets en contra ante el croata Marin Cilic, número 29 del ránking, para alcanzar las semifinales del torneo (6-1, 3-6, 6-7(4), 6-2 y 6-2, en tres horas y 18 minutos).

Djokvoic atravesó un profundo bache en su juego en los sets centrales del partido y estuvo al borde de una eliminación contra pronóstico, poco después de que el vigente campeón, Andy Murray, cayera en la pista central ante el búlgaro Grigor Dimitrov y que el español Rafael Nadal, número uno del mundo, claudicara ayer ante el australiano Nick Kyrgios.

Djokovic, de 27, que este año se ha puesto bajo las órdenes técnicas del extenista alemán Boris Becker, tres veces campeón en el All England Club, parecía encarar hoy un duelo de trámite al hacerse con el primer set en la pista 1 en apenas 27 minutos. Quizás el exceso de confianza hizo que Cilic le sorprendiera en el segundo parcial (6-3).

Todo parecía controlado para el serbio, ganador de Wimbledon en 2011, a pesar de esa contrariedad. El croata, sin embargo, no perdió los nervios ante el primer cabeza de serie y volvió a ponerle contra las cuerdas en el tercer set.

A pesar de que Djokovic se impuso al resto al final del set, Cilic pudo forzar un desempate en el que superó con claridad al serbio.

A partir de ese punto, sin embargo, el primer cabeza de serie despertó de su letargo y el croata comenzó a ver pasar los puntos sin poder reaccionar.

En 33 minutos, Djokovic equilibró el duelo con un contundente 6-2, y en otra media hora estaba listo para llevarse también el último parcial con claridad (de nuevo 6-2).

Djokovic no ha perdido en los cuartos de final en el All England Club desde 2009, y en las últimas cuatro temporadas tan solo ha quedado fuera de una semifinales de Grand Slam el pasado enero, en Australia.

Derrota de Andy Murray

El próximo rival del serbio será Dimitrov, un corpulento tenista de 23 años (un metro noventa centímetros de altura) que saca con regularidad a más de 212 kilómetros por hora. El búlgaro derrotó este miércoles al británico Andy Murray, defensor del título en Wimbledon, por 6-1, 7-6(4) y 6-2, en dos horas y un minuto.

El escocés, de 27 años, aspiraba a clasificarse para su sexta semifinal consecutiva en Londres, pero se cruzó en su camino un tenista que le cortó el paso antes de lo previsto con su potente saque, como ya le ocurrió ayer al número uno del mundo, el español Rafael Nadal, frente el australiano Nick Kyrgios.

Ante la atenta mirada de los duques de Cambridge, el príncipe Guillermo y su esposa Catalina, Murray cerró hoy por sorpresa su camino este año sobre la hierba de Wimbledon.

Murray no había perdido en cuartos de final en Londres desde 2008. Entre 2009 y 2011, el de Dunblane perdió en el penúltimo partido, mientras que en 2012 alcanzó por primera vez la final, que perdió ante el suizo Roger Federer, y en 2013 logró finalmente su objetivo en el All England Club.

El héroe local en Londres quería convertirse esta temporada en el primer británico que revalidaba el título de Wimbledon en 78 años, desde que lo hizo por última vez el inglés Fred Perry.

Dimitrov, sin embargo, acabó con una racha de 17 partidos consecutivos sin perder del escocés, que hasta ahora no había dejado escapar un solo set en su camino hasta los cuartos de final del torneo.

Ante el brillante estado de forma que había mostrado hasta hoy, Murray saltó confiado en el segundo turno a la pista central, sin esperar la sacudida que le asestó en 25 minutos Dimitrov, que selló un contundente 6-1 en un fugaz primer set.

Con el público británico helado en sus asientos, el búlgaro convirtió ese primer parcial en una tortura para el tercer cabeza de serie, que tan solo acertó a anotarse cinco puntos al resto ante un tenista de un metro y noventa centímetros que superaba con claridad sus defensas tanto al primer como al segundo servicio.

Con bolas que superaban los 217 kilómetros por hora, Dimitrov se adueñó del partido a pesar de los ánimos que infundían las gradas al tenista local.

En el mismo escenario donde se colgó el oro olímpico en 2012, Murray todavía supo encontrar las fuerzas que le permitieron romper el servicio de su rival para ponerse 4-4 en el segundo set, y luchó después para defender dos complicadas bolas de ruptura con 5-5 que habrían puesto en bandeja definitivamente el duelo para el búlgaro.

Con todo, Murray no aguantó los embates de Dimitrov en el desempate de ese parcial, que cayó del lado del décimo primer favorito en el torneo.

Los espectadores de la central todavía esperaban un milagro en el tercer set, pero Murray parecía saber que el partido ya no tenía solución.

Victoria de Federer

Por su parte, el suizo Roger Federer, cuarto cabeza de serie en Wimbledon, alcanzó hoy las semifinales del torneo al superar a su compatriota Stanislas Wawrinka, quinto favorito, por 3-6, 7-6(5), 6-4 y 6-4, en dos horas y 33 minutos.

Federer empezó el partido a remolque, perdiendo su primer set este año en el All England Club, pero se recuperó acto seguido hasta abatir a Wawrinka por cuarta vez en un Grand Slam -todas las que se han enfrentado en uno de los cuatro grandes-.

Federer es el jugador que más semifinales de Grand Slam ha disputado en la historia del tenis (35), por delante de jugadores como el estadounidense Jimmy Connors (31) y el checo Ivan Lendl (28).

A sus 32 años, Federer aspira todavía a pulir los números de una de las carreras más brillantes del tenis profesional.

El suizo está conjurado para hacerse este año con su octavo Wimbledon -sería el primer jugador que lo logra-, que representaría el décimo octavo Grand Slam en sus vitrinas, mejor que nutridas que las de cualquier otro tenista en la historia.

Ante Wawrinka, que conquistó este año Australia en una final ante Nadal, Federer se coronó hoy además como el segundo tenista con más partidos ganados en Wimbledon (72 a favor por 8 en contra), y superó así el alemán Boris Becker (71-12), actual entrenador del serbio Novak Djokovic, primer favorito en Londres.

Esta tarde, en la pista central del All England Club, Federer se repuso de un primer set en contra y, tras derribar las defensas de Wawrinka en el desempate del segundo parcial, afrontó dos últimos sets más plácidos y cerró el duelo en su quinta bola de partido.