El nuevo entrenador del Barcelona, el argentino Gerardo «Tata» Martino, cree que sería «un fracaso absoluto» que el conjunto azulgrana no conquistara un título esta temporada, porque «es un club que está acostumbrado a ganar y lo que ofrece su plantel es de lo mejor del mundo».

Tata Martino es consciente de que llega a un club, al que «nunca» imaginó que entrenaría, por los problemas de salud de Tito Vilanova, con el que ha hablado en las últimas horas. Y también que tiene entre sus manos un modelo de éxito que no conviene cambiar y un grupo de jugadores que «ha vivido muchos momentos de esplendor». «El estilo del club es fundamentalmente el estilo de los jugadores. Intentaremos mantener el mismo esquema del 4-3-3 y confirmar esa forma de jugar con la que se sienten muy cómodos. Aunque, trataremos de insertar cuestiones personales», explicó en su presentación.

Con un discurso locuaz, humilde, coherente y sensato, Martino llega con la lección aprendida. Sabe que va a entrenar un equipo que gravita en torno a Leo Messi, al que admitió no conocer personalmente. «Leo explotó su rol de goleador como centro delantero y seguirá jugando exactamente en el mismo lugar», comentó, sobre la «Pulga» que, según Zubi, «no ha tenido nada que ver» en el fichaje de su paisano. Además, Martino se mostró convencido de que Messi y Neymar se entenderán sobre el terreno de juego: «No se me ocurre pensar que dos jugadores como Messi y Neymar no puedan jugar juntos. En todo caso, si no pudieran hacerlo, sería un déficit del entrenador y no de los jugadores».

Contundente se vio a Martino cuando se le preguntó por Cesc Fàbregas y el interés del Manchester United por hacerse con sus servicios. «Si el club rechazó dos veces una oferta por él, yo agrego una tercera. Lo vamos a tener aquí», afirmó.