El BM Servigroup Benidorm se convertía este fin de semana en el segundo equipo de la Comunidad Valenciana, únicamente por detrás del Puerto de Sagunto de la Liga Asobal. Uno de los artífices de este logro es un joven técnico alicantino Isidre Pérez Marín, que la pasada temporada se hacía cargo del equipo en el que estaba como ayudante de Pepe Jorro y en la presente ha logrado llevarlo a la segunda categoría nacional.

Ayer Isidre reconocía que "nadie pensaba al principio de temporada que estaríamos en estos momentos festejando un ascenso, si acaso la permanencia en la categoría, después de haberse marchado del equipo jugadores importantes y haber hecho una renovación con jugadores de mi confianza, pero con escasa experiencia. No obstante el buen inicio de temporada, hizo que el equipo cogiera confianza y con mucho sacrificio y amor propio logramos plantarnos en una fase de ascenso, que ya era un premio para esta plantilla". Reconoce también el técnico que hubo fortuna en la clasificación como mejor tercer equipo. "Está claro que ganamos un solo partido, pero quizás el más importante, el primero y ante el equipo anfitrión el Aranga de Soria, en el segundo ante el Zamora llegamos a tener de inicio un 1-4 a nuestro favor, pero ellos supieron contrarrestar nuestro sistema defensivo y le dieron la vuelta al marcador e incluso sacarnos muchos goles de ventaja, pero este equipo ha demostrado muchas veces esta temporada su raza, para dar la vuelta a los partidos. Tuvimos balón para empatar al final, pero no se aprovechó y perdimos de dos y en el último partido pudimos ganar, pero ya llegamos muy justos de fuerzas, con Koke lesionado y jugábamos a las once de la mañana, cuando el día anterior acabamos. Después tuvimos que sufrir esperando que el Antequera le ganase al Chapela pero ha sido una experiencia maravillosa".