Katia Sergeeva nació en Siberia (Rusia) hace 48 años y forma parte de la historia viva del Elda Prestigio porque el 2 de mayo de 1999 marcó un gol, a falta de cuatro segundos, que valió el primer título liguero para el equipo eldense y el fin de 20 años de hegemonía del mítico Iber de Valencia.

También hizo historia en Europa al anotar el primer gol del Elda Prestigio en competición continental. El 13 de octubre de 1996, el equipo eldense recibió el "bautismo" europeo en Eslovaquia al debutar en la extinguida City Cup ante el Banskà Bystrica. "El gol que valió una Liga sí lo recuerdo, pero el tanto de Eslovaquia ya no lo recordaba", comenta Sergeeva, que ahora reside en Alicante apartada un tanto del deporte en activo.

Sergeeva llegó a España para jugar una temporada en el EMT Pegaso, otra con el extinguido Amadeo Tortajada, tres en el Bidebieta de San Sebastián y seis con el Elda Prestigio donde se retiró a los 38 años: "Guardo buen recuerdo de mi estancia en el Elda Prestigio, un gran equipo al que entrenó Ángel Sandoval".

También asegura que su época como jugadora coincidió con la expansión del balonmano femenino en España: "Tuve suerte porque cuando llegué a Madrid se podía vivir del balonmano, ahora no".

Katia afirma que cuando jugaba en el Elda Prestigio "el club pagaba al día a las jugadoras, pero ahora no hay dinero, ni patrocinadores en ningún sitio, y la crisis afecta al deporte profesional".

La exextremo, que dio la primera Liga al Elda afirma que vive retirada del deporte: "Dedico el tiempo a mi familia y desde la distancia observo cómo ha cambiado el balonmano a causa de la crisis económica".

Sergeeva dice que los clubes deben sustentarse de sus canteras "porque ahora no hay dinero para fichar ni para pagar sueldos".

La crisis ha llevado al Elda Prestigio a la última categoría del balonmano después de haber jugado en Europa de manera consecutiva durante los últimos 15 años.