La destitución de Miguel Martínez como entrenador del filial del Eldense ha desatado una serie de manifestaciones, acusaciones y descalificaciones hacia los dirigentes del club presidido por Julián Fernández.

Martínez fue destituido la noche del martes, como anticipó ayer este diario, después de que el Eldense B goleara al Monóvar B (11-0), estando el equipo invicto y liderando el grupo XVI de Segunda Regional con cuatro puntos de ventaja sobre el segundo.

El preparador asegura que "no me cayó de sorpresa porque el domingo, Julián Fernández, presidente del Eldense, se dedicó a pregonar por la ciudad que iba a ser cesado como entrenador".

También afirma que la destitución se la comunicó Hugo Rico, secretario técnico, y José Antonio Pérez, director del fútbol base. "En el Eldense la cabeza visible es Manuel Guill, flanqueado por sus dos hijos, el vicepresidente Manu y el capitán Marcos, el resto de directivos son una banda".

La versión del Eldense facilitada por José Antonio Pérez a la prensa es que "fue cesado porque no entraba en el perfil de entrenador que buscamos". El sustituto es el alicantino Eugenio Sánchez "Uge", de 24 años de edad, ayudado por Mario Cartagena.

Martínez, que acudió anoche a los campos de La Sismat para despedirse de los que han sido sus jugadores hasta el domingo, puntualiza que junto a él se ha marchado el delegado Joaquín Plaza y Joaquín Maestre, éste último era la persona que ayudaba económicamente al Eldense B.

El entrenador asegura que "nunca dimití, lo que pasa es que el 2 de enero, los técnicos del fútbol base hicimos un plante porque no hemos cobrado las nóminas de noviembre y diciembre".

Ese mismo día les visitó el presidente Julián Fernández . "Vino para decir que no podía pagar porque los anteriores dirigentes del fútbol base no habían dejado dinero", aseverando que cuando cobró las nóminas anteriores "las abonó Ricardo Fernández, entonces presidente del fútbol base".

Martínez asevera que "yo sabía que era carne de cañón, porque en julio puse pancartas de apoyo a los anteriores dirigentes, me enfrenté a Guill en una asamblea y en otra a su hijo Marcos, y eso ni lo olvidan ni lo perdonan". afirma.