El misterio une a José Mourinho y Josep Guardiola, que no dan señales de la decisión que tomarán de cara al superclásico del sábado (La Sexta 22:00 horas peninsular) entre el Real Madrid y el Barcelona: ¿Osadía o prudencia? Nadie sabe aún con precisión qué pasa por la cabeza de ambos entrenadores.

La evolución del Real Madrid en los últimos meses es tan evidente que ya casi nadie se acuerda de que en cierto momento de la pasada temporada, en abril, jugó ante el Barcelona con el defensa Pepe en la medular, lo que provocó no pocas críticas para Mourinho.

Pero el técnico del Real Madrid enseñó otra propuesta en la Supercopa de España, en agosto. A pesar de perder, los analistas alabaron su intención de buscar al Barcelona muy arriba, presionando la salida del balón azulgrana.

Ahora, y teniendo en cuenta que el Real Madrid tiene tres puntos más que el Barcelona y un partido menos, la cuestión es saber si se verá a un Mourinho osado o si, por el contrario, jugará bien armado atrás para salir al contraataque.

"Jugarán Di María, Cristiano e Higuaín o Karim", dijo el miércoles Mourinho, confirmando el "tridente" ofensivo. Entonces, y dando por seguro que tanto Xabi Alonso como Sami Khedira tienen el puesto garantizado en la medular, la duda es saber quién será el acompañante.

La piedra angular está en Mesut Özil. Si el alemán juega, el Real Madrid presentaría su propuesta más osada. En cambio, si Mourinho sitúa a Lass o Fabio Coentrao en la medular, habrá "trivote".

Otra cosa es cómo utilice ese eventual trío de centrocampistas. Si presiona en el área contraria, se verá una propuesta parecida a la de la Supercopa. Pero otra posibilidad es que estos tres volantes se cierren en torno a su defensa.

Pero no sólo la decisión de Mourinho fue cuestión de análisis estos días previos al clásico, porque también Guardiola rodeó de misterio su propuesta para el Santiago Bernabéu.

El equipo azulgrana usó mucho durante esta temporada un esquema con tres defensas, llenando el terreno de juego de centrocampistas para asegurar la posesión.

Hay quienes creen que sería un esquema propicio para dominar al Real Madrid y quienes piensan que es una temeridad cerrar con tan pocos defensores ante un conjunto tan rápido como el Real Madrid.

"Los riesgos son más grandes, pero es un sistema factible para competir con los jugadores que tenemos hoy en día", analizó el centrocampista Xavi Hernández esta semana.

La otra opción es emplear los clásicos cuatro defensas, aunque para ello sacrificaría un centrocampista.

Otro dilema le queda a Guardiola por resolver: ¿David Villa o Alexis Sánchez? El español atraviesa una temporada complicada, con más suplencias de las pensadas inicialmente, lo que está dando mucho de qué hablar.

Mientras, el chileno parece cada vez más en forma y partidos como el del clásico sirven para justificar una inversión de 40 millones de euros (53,6 millones de dólares).

Según se ve, Mourinho y Guardiola ya comenzaron a jugar el clásico, envolviendo sus respectivas alineaciones en un manto de misterio que dio para incontables debates. Y como suele suceder en estos casos, la validez o no de sus decisiones quedará sujeta a un resultado. Ganar o perder, ésa será la diferencia.