El Orihuela se dejó ayer su privilegiada posición de liderazgo en Ontinyent. Justo triunfo del equipo valenciano, que realizó el mejor encuentro de la temporada frente a un temido rival, que encabezaba la clasificación hasta ayer mismo. Se esperaba que el Orihuela llegara cansado después de disputar el pasado miércoles la Copa del Rey contra el Sant Andreu con victoria a domicilio. Pero ni mucho menos fue así. Fue un duelo de poder a poder, en el que el cuadro de la Vega Baja dejó su impronta de equipo cuajado y maduro.

El partido para nada merecía ser de Segunda B, con dos equipos con una fortaleza física impropia de dos conjuntos a estas alturas de Liga. Hubo derroche de fuerza e intensidad durante la mayor parte del choque.

La primera mitad fue blanquinegra completamente, con grandes ocasiones de gol por parte de la escuadra de Roberto Granero, que no subieron al marcador. Sin embargo, avisó el Orihuela con un peligroso mano a mano que Alberto le ganó a Cases.

La mejor oportunidad local la tuvo Fernando Béjar, que lanzó fuera de a portería de Unai Alba cuando se encontraba en inmejorable situación para haber inaugurado el marcador. No obstante, el premio llegó poco después, al filo del descanso. Un servicio de Kikín a Santos lo controló el brasileño, que batió por debajo al excancerbero del Hércules.

A tumba abierta

En el segundo tiempo, el conjunto de la Vega Baja quiso acreditar su buen momento y dio un paso adelante. Influenciado por la salida de Miguel Ángel, se hizo con el control del partido. Los jugadores de Asier Garitano fueron los que mayor posesión tuvieron y rozaron el empate. Sin embargo, la ocasón más clara fue para el Ontinyent.

Acuciado por el marcador en contra, el técnico visitante dio entrada a Iban Espadas para buscar más profundidad y llegada en el área del Ontinyent. Y cuando todo parecía que el partido se cerraría

con 1-0 por la falta de acierto del Orihuela, llegó la genialidad de Carlitos. El delantero realizó una acción individual marca de la casa: se llevó el balón desde la línea de fondo, se internó por la banda y con un fuerte disparo batio a Unai Alba.

El Orihuela vio de este modo frustrado su magnífico e histórico arranque de la competición, puesto que contaba por victorias sus tres partidos en Liga, que le otorgaron hasta ayer la condición de líder en el grupo III de Segunda B, así como en la Copa del Rey.

En el bando rival, la de ayer es la primera victoria del Ontinyent en casa, que calmará los ánimos tras las lesiones de larga duración de Gonzalo, Raúl Muñoz, Fali y Javi Gómez, aunque se espera que lo del delantero dure menos tiempo.

ONTINYENT: 2. Alberto, Forte, Óscar López, Diego Alegre, Fernando Béjar

(Borja, 75'), Kikín, Urrea (Carlitos, 85'), Álex Cacho, Navarro, Javi Salero y Santos (Dani Bardolet, 69').

ORIHUELA: 0. Unai Alba, Benja, Navarro, Teo, Cases, Dani Gómez, Álex García (Ibán Espadas, 55'), Arqués (Manrique, 78'), Pelusa, Carlos Delgado y Diego (Miguel Ángel, 46').

Goles. 1-0. Santos, m. 45; 2-0 Carlitos, m. 91

a ÁRBITRO: Benjumea Álvarez.

TA T. amarillas: Amonestó a los locales Óscar López, Álex Cacho, Forte y Dani Bardolet; y a los visitantes

Navarro, Diego, Cases e Ibán Espadas. e Estadio: Municipal de El Clariano ante unos 1.500 espectadores.