La Federación Italiana de Ciclismo ha dado un paso más en su contundente lucha contra el dopaje y ha cerrado las puertas de la selección nacional a cualquier ciclista con antecedentes de dopaje, independientemente de la antigüedad de la sanción recibida.

La resolución de Federciclismo prohíbe además la participación en los campeonatos nacionales a cualquier ciclista que haya recibido una sanción por dopaje a lo largo de su carrera. Inicialmente, se pensaba que el organismo iba a poner como fecha referencia todo positivo posterior al verano de 2008, pero finalmente ha decidido que no haya ninguna limitación temporal, según informa 'La Gazzetta dello Sport'.

La resolución de la Federación Italiana provoca que, en el próximo Mundial de Copenhague, el equipo 'azzurro' sufrirá las bajas de ciclistas importantes como Michele Scarponi, Ivan Basso, Danilo Di Luca o Alessandro Petacchi. El seleccionador italiano, Paolo Bettini, no ha tardado en lamentar esta "dura" medida que mermará mucho las opciones de una de los equipos tradicionalmente más potentes.