José Luis Moltó, el segundo jugador español en la historia del voleibol que más veces ha defendido la camiseta de la selección -lo ha hecho en 405 ocasiones-, ha anunciado hoy en Soria su retirada "por respeto a su cuerpo y al club", el Ciudad de Medio Ambiente.

El jugador, emocionado, ha leído a los medios de información una carta de despedida donde ha reconocido que el hecho de tener roto el menisco y tener que volver a pasar por el quirófano -será la cuarta operación de rodilla- ha forzado esta decisión. "Por respeto a mi cuerpo y al club, que aunque me ha animado a seguir jugando, considero que no estaría en condiciones de rendir", admitió.

Además de sensaciones de tristeza, el central también las tiene de alegría cuando echa la vista atrás y ve todas las "cosas bonitas" que le ha dado el voleibol y que "sin duda volvería a repetir".

"El voleibol me ha permitido conocer ciudades de todo el mundo, vivir en países con diferentes culturas en donde he hecho grandes amigos, aprender idiomas y, lo más importante, conocer a la que es mi mujer y me ha dado lo que más quiero en este mundo, que son mis hijos", ha asegurado.

Moltó, en su despedida, se ha acordado de sus orígenes deportivos en Concentaina, su pueblo alicantino natal -que en 2009 le nombró su hijo predilecto-, en cuyo club aprendió a jugar y a Soria que en su momento le "permitió empezar como profesional" y este año le "ha dado la oportunidad de disfrutar" con sus amigos jugando el último año de su carrera.

El jugador, que cuenta en su palmarés con siete Ligas y tres Copas, repartidas en los diferentes clubes españoles y extranjeros en los que ha jugado, ha mostrado su deseo de continuar ligado al voleibol desde la faceta de entrenador.

El mayor éxito deportivo, al igual que del propio voleibol español, se produjo el 16 de septiembre de 2007 cuando la selección consiguió la medalla de oro del Campeonato Europeo frente a Rusia en Moscú y Moltó, "El Muro", fue reconocido como el mejor bloqueador del torneo.