El central benidormense José Carlos Gil se perderá el encuentro de mañana ante el Alicante y previsiblemente también el próximo en Alzira por una microrrotura fibrilar. Ayer lo confirmó el propio jugador, aunque es de grado uno, por tanto menos importante de lo que en principio se pensaba, pero de todos modos supone de 10 a 20 días de baja. "Voy a ver si al menos puedo estar para Alzira, aunque será complicado, pero en caso de que tengamos que jugar el play-off por la permanencia sí estaría en condiciones", afirmó. Añade el jugador que "la plantilla está muy concienciada de la importancia que tiene el partido ante el Alicante, porque sólo nos vale la victoria".

Respecto al resto de posibilidades que se puedan daren función de los resultados del Sporting Mahonés-Alzira y Alcoyano-Gramanet, reconoce que "lo más importante es que nosotros hagamos un buen partido y sumemos los tres puntos y después ya se verán todas las posibilidades que puedan darse de cara a la última jornada". Tampoco espera el defensa que el Alicante pueda dar facilidades. "Ellos no se juegan nada, pero como es normal querrán ganar el partido porque no conozco a ningún jugador que quiera perder".

Gil confía que en los dos últimos partidos de la temporada la suerte les favorezca un poco más que en los últimos encuentros. "Es increíble lo que nos ha pasado en las últimas jornadas", dice.