El Benferri espera conocer hoy las posibles sanciones a sus cinco jugadores y al entrenador que fueron expulsados el pasado domingo ante el Alicante B, y que provocó la suspensión del partido al quedarse el equipo de la Vega Baja con seis futbolistas en el terreno de juego.

El árbitro se vio obligado, según reza la normativa, a suspender el partido porque no se podía desarrollar el choque al tener uno de los contrincantes cinco jugadores de campo y el portero.

Con este panorama, el Benferri, que ascendió la pasada temporada de Primera Regional, ve muy complicado mantener la categoría. A falta de tres jornada para terminar el campeonato son penúltimos a seis de la salvación con sólo nueve puntos en juego.