El Barcelona parte con dos goles de ventaja con respecto al Real Madrid en la carrera hacia la final de Wembley. Será la vuelta de las semifinales de la 'Champions', el colofón de un póquer de clásicos, algo más que un partido vista la crispación vivida en los tres encuentros precedentes.

Los dos goles de Leo Messi en la ida abren las puertas de la final para los azulgranas. Este martes se pondrá punto y final a la cuarta eliminatoria de la historia de la Copa de Europa entre ambos equipos, hasta ahora 2-1 a favor del Real Madrid, las dos conseguidas en sendas semifinales.

Los barcelonistas lo tienen todo a su favor para firmar una de sus semanas grandes. Si le ruedan bien las cosas, el Barça puede certificar el pase a su séptima final de la Liga de Campeones, la tercera en las últimas seis temporadas.

Para ello, Pep Guardiola contará con sus mejores hombres. Recuperará seguramente a Andrés Iniesta, que no jugó en la ida disputada en el Bernabéu a causa de un problema muscular, y también volverá a contar con el capitán Carles Puyol, quien descansó ante la Real Sociedad.

En realidad, la entrada de Iniesta es la única variación con respecto al once que jugó en Madrid hace seis días. Guardiola mantendrá el sello que tan buen resultado le ha dado desde el inicio de temporada.

Únicamente la enfermedad de Eric Abidal le impedirá formar con su once de gala, aunque su sustituto en el Bernabéu, Carles Puyol, rindió a un gran nivel como lateral izquierdo.

Todo apunta a que Javier Mascherano, una de las sensaciones del final de temporada, será el acompañante de Gerard Piqué en el eje defensivo. Por la derecha, es indiscutible Dani Alves.

En las seis piezas de construcción de juego y de definición, hay pocas dudas. Busquets jugará de mediocentro por delante de Xavi y de Iniesta. Pedro y Villa formarán la tripleta de atacante con Leo Messi, el jugador que desequilibró la balanza en la ida.

El Barça se encuentra ante un momento histórico, ante una semana grande si es capaz de cerrar su pase a la final europea y el título liguero el próximo domingo, aunque para ello depende de su victoria y también de que el Madrid no gane en Sevilla el sábado.

En todo caso, la presencia de los azulgranas en las semifinales es un síntoma de su buena salud deportiva. Campeón hace dos años en Roma (2-0 ante el Manchester United), el Barça acumula cuatro semifinales consecutivas en Europa, todo un síntoma de su buen momento. Si alcanza la final volverá a Wembley, donde conquistó su primera Copa de Europa hace ya diecinueve años

El Real Madrid llega al Camp Nou con fe en el milagro. Sin perder la esperanza pese al 0-2 del Bernabéu. Agarrándose a remontadas épicas, al orgullo madridista. Consciente de la dificultad que conlleva levantar la eliminatoria pero impulsado por la ilusión de conquistar la 'décima'.

Aún latente la jugada que marca la eliminatoria. La entrada de Pepe a Dani Álves y una expulsión que desesperó a José Mourinho. El técnico pasa del ataque frontal a UEFA y Barcelona a un segundo plano. Como pasa de un planteamiento conservador al ataque. Obligado por las circunstancias. El Real Madrid saldrá a jugar de tú a tú a su eterno rival. La última vez que lo hizo se llevó cinco goles.

Pero en el recuerdo madridista no está la goleada liguera de la primera vuelta, sino la última ocasión que los dos grandes de España cruzaron sus caminos en las semifinales de Liga de Campeones. El 0-2 del Camp Nou, con goles de Zidane y McManaman, serviría para igualar las fuerzas. Es su camino a seguir.

Las bajas importantes en el aspecto defensivo, con los sancionados Sergio Ramos y Pepe, más Sami Khedira en la medular que no se recupera a tiempo de su lesión muscular, las cubrirá Mourinho con Raúl Albiol, el regreso de Carvalho y 'Lass' Diarra.

Enterrará el trivote que condujo al éxito en la final de Copa del Rey para pasar al habitual 4-2-3-1, en ataque juntando a Di María, Özil, Cristiano Ronaldo y Benzema.

El mensaje de Mourinho a sus jugadores busca liberar presión, después de que el objetivo de la temporada está cumplido con la conquista de un título.

Todo lo que llegue para culminar su primera temporada solo puede ser bueno. El Real Madrid no se dará por vencido hasta el pitido final.

El último capítulo de los cuatro clásicos en 18 días está servido con todos sus ingredientes.

Alineaciones probables:

Barcelona: Valdés; Alves, Mascherano, Piqué, Puyol; Busquets, Xavi, Iniesta; Pedro, Messi y Villa.

Real Madrid: Iker Casillas; Arbeloa, Raúl Albiol, Carvalho, Marcelo; 'Lass' Diarra, Xabi Alonso; Di María, Özil, Cristiano Ronaldo; y Benzema.

Árbitro: Frank de Bleeckhere (BEL).

Hora: 20.45. Camp Nou (98.000 espectadores).