Paralelamente a la ya consolidada prueba, se celebró la primera edición de los 10 kilómetros y 750 metros Ciudad de Torrevieja. El pistoletazo de salida se realizó al mismo que el del Medio Maratón, y el circuito coincidía, aunque era necesario completar solo una de las dos vueltas que daba al trayecto la más longeva de las dos pruebas. Aunque no había premios en metálico, a diferencia de las cuantiosas sumas del Medio Maratón, 550 corredores se inscribieron, llegando a meta 498 corredores, que sintieron la satisfacción de competir en un ambiente festivo y de camaradería, además de llevarse la abundante bolsa del corredor, innumerables vivencias, multitud de servicios y numerosos trofeos.
Los inscritos de esta prueba portaban un dorsal azul, y los del medio maratón amarillo. Esta «media-media», que prácticamente desde ya prepara su segunda edición debido a su buena acogida, propició un aluvión de corredores populares, que fueron decisivos en que la participación total de la jornada, entre ambas carreras, se elevara a 2.385 inscritos. Esta prueba añadió un aliciente más a la
mañana, puesto que prácticamente a la media hora del inicio ya se tensaba la correspondiente cinta para que fuera traspasada por el ganador y la ganadora.
El mejor fue Horma Mounir, con 34 minutos 46 segundos, del Club Atletismo Alcoy, siendo segundo y cuarto respectivamente los hermanos David y Gorka Apraiz, del Running Team Alicante. Vicente Cardona, también del Alcoy, ocupó la tercera plaza.
En féminas, la eldense Leyre Gallardo venció con un tiempo de 46 minutos y 41segundos, siendo segunda Elena Ferrer del Mandarache Cartagena y tercera Mari Carmen Abril. La ganadora evaluó positivamente la iniciativa y se mostró dispuesta a repetir en 2012, aunque reconoció que con tantos corredores al principio era importante «estar atento si quieres optar a las primeras posiciones».
En esta primera experiencia de los 10 kilómetros y 750 metros fue destacada por decenas de corredores, en su mayoría españoles y muchos de ellos de la Vega Baja, como Dani y Quinín, de Rojales, y su novia, Ángela de Rafal. También de la comarca era Eva Buitrón, corredora local, pero alistada en el Trikilómetros de Almoradí, que venció en la categoría de veteranas. A pesar de la exigencia, en general los corredores de la media «media» sobrellevaron con menos muecas de esfuerzo su participación y con más sonrisas que sus esforzados compañeros que se enfrentaban a los 21 kilómetros y 97 metros.
