El piloto italiano Valentino Rossi (Yamaha) se volvió a subir a una moto tras el accidente que sufrió en el Gran Premio de Italia, que le provocó una fractura de tibia y peroné, y realizó un entrenamiento en el circuito de Misano.

El actual campeón del Mundo pilotó una Yamaha YZF-R1 de SBK, cedida por el Yamaha World Superbike Team, con la que completó dos tandas, de 10 y 14 vueltras respectivamente.

Con su vuelta a las pistas Rossi ha podido evaluar su condición física y el desarrollo de su rehabilitación, para poder acelerar su vuelta al Campeonato del Mundo de MotoGP.