"Ojalá siempre que falle sea con un 2-0 en el marcador a favor para España", manifestaba David Villa al término del partido de ayer, tras marcar los dos tantos y fallar un penalti que hubiera supuesto el 3-0. El delantero asturiano reconocía que afrontaban el partido con cierta presión por el mal debut contra Suiza, y así lo explicaba: "Sabíamos que se nos complicaba el Mundial y afrontábamos este partido con eso, pero hemos ganado de más de un gol...". "El resultado pese a lo corto es bueno, hemos cumplido el trámite y estamos contentos", señalaba. "Esto es el fútbol, el otro día estuvimos bien y no marcamos...", comentaba, refiriéndose al primer encuentro del Mundial ante Suiza. "En el partido contra Chile y con este resultado dependemos de nosotros mismos y es lo mejor del choque", señalaba.

Muy a gusto en el campo

De su posición en el campo, más pegado a la banda, el jugador del Barça, confesaba haberse sentido muy suelto. "Me he encontrado muy bien, muy a gusto, y aunque repito que el resultado es muy corto, nos sirve para lo que buscábamos", comentaba. El jugador azulgrana dedicaba el triunfo a sus seres más queridos. "A mi familia, mis hermanas, a la santina...", enumeraba casi sin aliento tras haber jugado un gran partido, en el que destacó por encima de todos sus compañeros. Del lance que tuvo con Izaguirre, que pudo costarle la expulsión, reconocía que había tenido un calentón innecesario. "No me enorgullece, pero no esperaba que me pisara y la reacción ha sido estirar el brazo...", aseguraba.

Estar en la siguiente fase

"Ser campeón del mundo está muy lejos para todos, pero sobre todo en el tiempo y ahora solo pensamos en ganar a Chile y estar en la siguiente fase", reflexionaba al respecto del favoritismo de España, en duda tras un inicio renqueante en Sudáfrica.