La Copa de Campeones de fútbol juvenil que arrancó el pasado lunes en Benidorm con la participación de los siete campeones de sus respectivos grupos de División de Honor, se resolverá mañana en el Municipal de Foietes con la disputa de la gran final. A la misma ha llegado el Real Madrid, que derrotó ayer al Athletic de Bilbao (2-1), y el Valencia, que hizo lo propio con el Betis (2-1).

El duelo entre madridistas y bilbaínos resultó muy igualado, con una parte para cada equipo. En la primera se adelantó el equipo merengue (minuto 31), al aprovechar Francisco Sol un error defensivo de los cahorros de San Mamés en el centro del campo y montar una contra fulminante. Apenas cinco minutos después, Sarabia aprovechó un rechace en corto del meta Magunazelaia a remate de Óscar Plano.

Tras el descanso, el equipo bilbaíno logró recortar diferencias al aprovechar Saborit de cabeza un rechace del meta madridista Pacheco. A pesar que el Athlétic tuvo alguna oportunidad más que no aprovechó, y el Real Madrid a la contra también pudo aumentar la diferencia, ya no se movió el marcador y los chavales de José Alberto Toril celebraron su pase a la final.

Segunda semifinal

En la segunda semifinal, el Valencia, que comenzó siendo dominado por el Betis, se adelantó en el minuto 6 tras un saque de esquina que remató el central Óscar. Con el marcador a su favor, los valencianistas controlaron el juego ante un Betis que demostró su calidad individual y que estuvo cerca de igualar el marcador en un disparo de Ezequiel que se estrelló contra el poste.

Los béticos lograron empatar en el minuto 40 y, con la igualada, se llegó al descanso. En la reanudación, a los doce minutos, en una jugada individual Paco marcó el 1-2, que a la postre resultó definitivo. Después apareció la lluvia que despobló las gradas de Foietes, que albergaron a 1.500 espectadores.

La gran final se celebrará mañana domingo a las 11.30 horas en Foietes en lo que se prevé un partido muy igualado y de máximo tensión.