De Papá Noel, de romano, de torero, de abeja, con quimono, con delantal o con traje. Cualquier indumentaria era válida para recorrer los 3.700 metros de la primera edición de la San Silvestre "Ciudad de Alicante" que se disputó ayer por las principales calles de la ciudad y que contó con la presencia de 3.067 participantes llegados de diversos puntos del país. El cielo totalmente despejado y una temperatura primaveral pusieron su grano de arena para que la jornada lúdico-festiva organizada por el Patronato de Deportes del Ayuntamiento de Alicante discurriera con normalidad y concluyera con un éxito "rotundo". Entre los participantes, se dejaron ver varios concejales del consistorio alicantino: Andrés Llorens, edil de Atención Urbana; Miguel Valor, concejal de Cultura; e Isabel Fernández, concejal de Deportes, que acompañó a la atleta más joven de la prueba. Su hija Sara, que con tan sólo un mes y una semana, formó parte en el recorrido que partió desde la Avenida Almirante Julio Guillen Tato y concluyó en el mismo lugar tras pasar por la Explanada, la calle Rafael Altamira, la Rambla, la Avenida de la Constitución, Alfonso el Sabio, Luceros, Avenida de la Estación, Serrano, Maisonnave, Doctor Gadea y Parque de Canalejas.

Con rigurosa puntualidad, la alcaldesa de la ciudad, Sonia Castedo, cortó la cinta y dio el pistoletazo de salida. Una traca irrumpió al paso de los atletas y otra recibió a Isaac López -11 minutos y 45 segundos después de salir-, vencedor de la prueba. Barcelonés de nacimiento y empadronado en Alicante, López se mostró "orgulloso" de ganar la primera edición de la San Silvestre y espera "que siga muchos años más". El alicantino David Apraiz y el benidormí Carlos Alegre completaron el podio. La primera mujer que hizo entrada en meta fue Bárbara Antón, alicantina residente en Las Torres de Cotillas (Murcia), y practicante de ciclismo, duatlón y triatlón. "Es la primera vez que gano algo en Alicante", reconoció satisfecha la deportista.

Los disfraces de los participantes centraron la atención, cuya originalidad y desparpajo al llevarlos fue recompensado por la organización. Julián Barrios, de 70 años y participantes más joven, que recorrió los casi cuatro kilómetros vestido de pastor, se llevó el premio al mejor disfraz. El podio lo completó un hombre con traje de buzo, aletas incluidas, y el personaje de los Simpson "Duff man".

Los grupos más numerosos también recibieron un galardón. El Judo Club Alicante, con más de cien participantes, se alzó en primera posición, seguido por el Club Apolana de Alicante y del Atlético Alicante Costablanca.

Esta prueba pone punto y final al programa "12 meses, 12 metas", que ha llevado a cabo el Patronato de Deportes a lo largo de 2009, para promocionar la cultura deportiva.