El Club Balonmano Almoradí Marhersol sufrió un severo correctivo en una de las pistas con más tradición balonmanística de España como es el pabellón de la Sociedad Deportiva de Anaitasuna.

El partido empezó siendo desigual como la diferencia de presupuestos y objetivos de cada equipo. Tanta desigualdad había que hasta la pareja arbitral también desentonaba. Un parcial de 10 a 1 en los primeros 12 minutos, propiciado por los rápidos contraataques, debido a los fallos de los almoradidenses, provocó que el encuentro se decantara del lado navarro en los primeros instantes.

El conjunto de la Vega Baja sufrió la descalificación del técnico del Almoradí, José Francisco Nolasco, por acumulación de sanciones, y a su capitán Sergio Rubio. Al descanso se llegó con el claro marcador de 25-10.

Tras el descanso, el partido no tuvo prácticamente historia, ya que el conjunto local jugó muy cómodo por la diferencia de goles y el intento de que el choque terminara con un resultado lo menos abultado posible.