Guillén, que mañana se sube de nuevo y por última vez a un escenario para representar la obra "El vals del adiós", ha recibido hoy un homenaje en el Teatro Calderón de Valladolid.

El actor se despidió oficialmente del teatro el pasado mes de junio en el Teatro España de Madrid tras 55 años de trayectoria.

El actor ha reconocido, en rueda de prensa en Valladolid, que el teatro es "una adicción" y "una pasión muy dolorosa" ya que requiere mucho trabajo en la preparación de las representaciones.

"Necesitas varios meses hasta que memorizas, ensayas", ha explicado Guillén, quien ha señalado que no quiere ser "un actor que se arrastra por los escenarios".

Por eso, a partir de ahora, centrará su trabajo en el cine y la televisión, según ha detallado.

Guillén, con palabras emocionadas, ha agradecido este homenaje porque es "un inmenso placer" que "la definitiva despedida" sea en Valladolid porque "es una ciudad cargada de recuerdos".

El ganador de un Goya ha estado acompañado en este "pequeño" homenaje por el director de cine Vicente Aranda, a quien le une una gran amistad, ha dicho.

Juntos han rodado películas y series para televisión como "Los jinetes al alba", de la que los dos guardan numerosos recuerdos.