El guitarrista flamenco, descendiente de tocaores y cantaores a quien su padre puso una guitarra entre las manos con tan solo seis años, vuelve a Alicante, diez años después de su actuación en el Aula de Cultura, para ofrecer el domingo por la tarde un concierto en el ADDA dentro del master de guitarra clásica.

Su carrera está marcada por la influencia del jazz. Debutó discográficamente en 1995 con Calle ancha y recientemente ha reeditado dos de sus mejores trabajos Paz y Española. Entradas desde 15 euros.