El poeta alicantino Luis Bagué Quílez por Clima mediterráneo y el novelista Javier Marías por Berta Isla fueron galardonados ayer con los Premios de la Crítica que otorgan anualmente los críticos literarios a los mejores libros de Poesía y Narrativa publicados en España en lengua castellana.

Clima mediterráneo, editada por Visor, es una obra que transita en el pasado y el presente, con reminiscencias a los toros, la pintura, el tren de alta velocidad y las redes sociales, pero con un fuerte componente social, según señala su autor. De hecho, Clima mediterráneo parte de la cuna de la tradición griega, del mar y la tierra que nos envuelve, hoy convertida en un «cementerio de sueños» para los refugiados, venidos en «circunstancias trágicas».

«Mi mirada es bastante escéptica, es decir, este es un libro que plantea la desesperanza, plantea algo que estaba lleno de sentido y que, con la modernidad, nos hemos ido vaciando, nos hemos ido deconstruyendo, desmontando... hemos pasado de los grandes monumentos de la historia a las ruinas del Mediterráneo», apunta Bagué, afincado en Mutxamel, y autor de una amplia trayectoria literaria premiada con otros distinguidos galardones como el Hiperión con Un jardín olvidado (2007).

«La poesía siempre ha sido igualmente necesaria o superflua, siempre dice cosas al lector contemporáneo. Un libro de poesía no nos va a salvar la vida o nos quita el hambre, pero nos ayuda a pensar o a sonreír, esa es su función. Nos ayuda a pensar sobre el mundo en el que vivimos, sobre la sociedad en la que estamos... la poesía está muy pegada a la piel del mundo contemporáneo», comenta Luis Bagué, doctor en Filología Hispánica por la Universidad de Alicante, y que actualmente trabaja como investigador «Ramón y Cajal» en la Universidad de Murcia.

Luis Bagué asegura que recibir el prestigioso galardón de la Crítica ha sido algo totalmente «inesperado», sobre todo por la lista de autores «consagrados» que aspiraban igualmente al premio, aunque en este sentido se mostró muy satisfecho por venir este del lado de la crítica especializada.

Clima mediterráneo, con versos que juegan con lo tradicional y la innovación, ya recibió el Premio Tiflos de Literatura, sumándose así en el caso de Bagué a una carrera ascendente con otros libros como Telón de sombras (2002, premio Antonio Carvajal y Ojo Crítico de RNE) o El rencor de la luz (2006, Premio Joaquín Benito de Lucas).

Por otro lado, el escritor y académico Javier Marías (Madrid, 1951) estaba situado a la cabeza de los favoritos del Premio de la Crítica en la categoría de Narrativa, galardón que ya consiguió en 1992 con Corazón tan blanco. Esta es la decimoquinta novela de Marías, que transcurre entre 1969 y 1995 y está protagonizada por Berta Isla y su marido, Tomás Nevinson, que se convierte en espía. El ponente del jurado José María Pozuelo señaló que Berta Isla (Alfaguara) es una «novela de gran altura en el contexto de la narrativa europea y supone una continuación del arco abierto en Tu rostro mañana, de la que hereda algunos personajes».

Los premiados en lengua catalana fueron Els fills de Llacuna Park, de María Guasch; y en poesía Convivència d'aigües de Zoraida Burgos, mientras que en lengua gallega los galardonados fueron Emma Pereira por Bibliópatas e fobólogos; y Lupe Gómez en poesía por Camuflaxe.

En lengua vasca los premiados fueron Aingeru Espaltza por Mendi-joak ( Mal de altura) y Luis Garde por el libro de poesía Barbaroak baratzean ( Bárbaros en el jardín).