Se creó en 1997 con el nombre de Donyet Ardit, que significa duende habilidoso. Y muy hábiles han tenido que ser en un doble sentido. Primero, para poder formarse y formar en el mundo de los malabares y las acrobacias. Segundo, porque no ha sido fácil mantenerse dos décadas en una ciudad como Alicante donde han recibido muy buenas palabras pero poco respaldo. El trabajo ha sido duro y constante, pero ahora, esta asociación dedicada a promover las artes circenses y el circo como herramienta de transformación social, cumple 20 años y quiere celebrarlo con una gala en el Teatro Principal de Alicante.

Será mañana, a las 20.30 horas, con un espectáculo en el que reúnen a compañías alicantinas, muchas de ellas con componentes que se iniciaron en Donyet Ardit y que luego volaron para trabajar fuera. Como Les Buffons, integrado por David García y Pablo Gomis, este último fundador de la asociación y miembro del Circo del Sol desde 2007. También Lucas Locus, socio de Donyet Ardit, ganador de la Carpa de Plata en Circuba en 2016, o El Fedito, alicantino igualmente, que mezcla escultura, malabares y poesía visual, o Antonio Becares, que llenará el teatro de globos. Todo ello con la presentación de otro alicantino que ha salido de esta asociación, Willbur.

De fuera de Alicante, actuarán Rubén Martín, formado en Canadá, que presenta un espectáculo de bici acrobática; Iván G. Torre, especialista en verticales que ha participado en festivales de diferentes países, y la alemana Roxana Küwen, que actuará por primera vez en España, con su número de trapecio y antipodismo (manipulación de objetos con los pies).

«Queremos que esta gala sea una muestra de hasta dónde pueden llegar los artistas de esta ciudad», apunta Estíbaliz Sanchís, socia de Donyet Ardit y encargada de comunicación, durante la presentación del acto, en el que estuvo acompañada por Lucas Escobedo, Carlos Such y el director del Principal, Paco Sanguino. No obstante, no todos los que querían estar han podido por motivos de trabajo. «Ha sido una pena -destaca Such- pero también una alegría porque demuestra que somos una cantera y que la gente está fuera trabajando en el circo».

Empezaron como una asociación de jóvenes que querían aprender la práctica del circo; a partir de ahí se puso en marcha un taller en el Centro 14 y después se trasladaron a El Disparate, dando el salto para convertirse en un vehículo socioeducativo para jóvenes en el IES Las Lomas. Además han organizado seis encuentros nacionales de malabaristas, jornadas de reflexión y formación en la Sede de la UA y talleres profesionales.

La gala cuenta con una fila 0, cuyas entradas se destinarán a los jóvenes que asisten a la escuela de circo. «Es una gala única, un producto que hemos generado y que no se va a repetir», afirma Carlos Such. Lucas Escobedo recuerda que cuando se empezaron a celebrar los encuentros de circo, «pasamos a ser un referente nacional», no solo por la difusión del circo sino «por el tema educativo y social».

Para Paco Sanguino, hacer un hueco en la programación del teatro al circo era algo pendiente, «teniendo en cuenta que tenemos a esta asociación que nos representa más allá de Alicante». Por eso, acogió el festival Circarte y ahora esta gala «que me atrevo a decir que va a ser un lleno absoluto». Y su intención es que todos los años en Navidad se haga una gala de circo en Alicante. «Hay algo que tienen el circo y la danza, y que el teatro no tiene, y es el interés por transmitir la maestría y su capacidad para asociarse».

El próximo sueño de Donyet Ardit pasa por conseguir abrir la Escuela de Circo Social en la Zona Norte de la ciudad. El espacio iba a ser el que albergó los cines Aba Seis. La promesa es de hace tres años. Todavía siguen esperando.