El intendente y director artístico del Palau de les Arts Reina Sofía de Valencia, Davide Livermore, presentó ayer la dimisión ante las trabas del Consell a la gestión del coliseo, principalmente en la contratación de cantantes, y por no dejarle compatibilizar su cargo con la dirección de escena. En una rueda de prensa a la que asistieron un centenar de trabajadores que aplaudiron su intervención, Livermore dijo que no dimite por haber recibido presiones relacionadas con la gestión artística ni presupuestarias sino por algunos planteamientos que hacen inviable su cometido como responsable de Les Arts. Según explicó, ha tomado la decisión después de que el borrador del informe de auditoría de 2016, que recibió el lunes, asegure que es incompatible ser intendente y director general con realizar trabajos como director de escena, como ha venido haciendo Livermore en los últimos tres años con el conocimiento y consentimiento del Consell, asegura.La auditoría también considera que los contratos directos con los cantantes no se ajustan a los criterios de contratación del sector público, una condición que Livermore considera de imposible cumplimiento ya que no se puede exigir que una primera figura como Plácido Domingo se presente a una audición para demostrar sus méritos.