...    
Información

Información

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Javier Reverte: «Estamos convirtiendo el mundo en una celda»

Especialista en literatura de viajes, el autor inauguró en el MACA el ciclo Escritores y el Mediterráneo organizado por Casa Mediterráneo

Javier Reverte: «Estamos convirtiendo el mundo en una celda»

¿Ve a algún Ulises en el Mediterráneo hoy?

Es muy difícil que haya Ulises porque el Mediterráneo ha cambiado mucho. Para los griegos era un lugar ignoto e incluso donde se llegaba al límite del mundo conocido, que eran las columnas de Hércules, el estrecho de Gibraltar. A partir de ahí no se sabía qué había y el mundo estaba lleno de mitos y fantasías. Y la figura de Ulises es difícil que se dé hoy. No veo a líderes actuales con una altura de miras como la que tenía nuestro querido Ulises. Desde luego, Rajoy no es parecido, ni Puigdemont.

¿Los países mediterráneos tenemos tanto en común como creemos o es un tópico?

Hay mucho en común. Conozco mucho el Mediterráneo en las dos orillas y siempre me encuentro como en casa. Hay un elemento religioso -es la cuna de las tres principales religiones: del cristianismo, el islam y el judaísmo- y elementos culturales: aquí nace la literatura, la poesía, y si empezamos a enumerar la lista de grandes escritores de las dos orillas no acabamos jamás. Luego está el clima, la larga historia de peleas y guerras entre nosotros, o el ludismo mediterráneo. Todo eso hace que sea un universo muy particular. A mí me determina mucho más el Mediterráneo, aunque sea de Madrid -que es una ciudad mediterránea, del interior- que mis elementos europeos.

¿El Mediterráneo no es un lugar más hostil hoy con la crisis de los refugiados, las pateras...?

Eso no es nuevo, es parte de nuestra historia dramática, siempre ha habido invasiones, guerras, hambrunas, miserias. La historia nunca es amable, y puede ser nueva la inmigración, el fenómeno norte/sur, pero no es nuevo el dramatismo y la tragedia.

Comparte que los nacionalismos se curan viajando...

Eso es de Baroja. Y el carlismo, leyendo, decía... (risas)

... ¿y dónde mandaría de viaje a Rajoy y a Puigdemont?

Primero, que salieran un poco de su entorno, sobre todo Puigdemont, que anda con la boina puesta y está haciendo un daño terrible, sobre todo en las generaciones de jóvenes catalanes a los que está haciendo confundir la democracia con la negación de la democracia. Él está negando la mayor y hace creer que eso es democracia, pero más bien hay elementos fascistas en su lenguaje. Le vendría bien bucear en la historia, salir un poco, leer algo más, y se le iría bastante la caspa. Y Rajoy es un líder de la caverna española, que tiene una ventaja sobre Puigdemont: que respeta la Constitución, y si un día no le votan, se va. El otro, no.

Pero fuera de España la imagen la gana el independentismo.

Pero eso es una apariencia. Quien más vocea ocupa siempre el primer plano. Esto es como una asamblea y el foco se pone en quien más chilla.

Usted firmó el manifiesto contra el referéndum del 1-O. ¿Ha tenido más críticas o apoyos?

No me han dicho nada. Yo lo firmé porque me pareció justo, es una defensa de la Constitución del 78, la que más ha durado en la historia de España, que fue muy difícil de conquistar. Veníamos de muchos siglos de opresión y dictaduras, con espacios muy breves de democracia, de un Franquismo arrollador y absolutamente cavernícola, y conseguir ese espacio de libertad no se puede malbaratar impunemente y decir que la Constitución no vale. ¿Cómo que no vale? ¿Y qué vale, decir mentiras ? Otra cosa es que se pueda reformar la Constitución. ¿Por qué no va a haber un referéndum? Con todas las de la ley puede haberlo.

Su último libro se titula Banderas en la niebla

Hay muchísimas, sí. Es un símbolo pero en el fondo es un trapo. Nunca me he emocionado ante banderas o himnos, y cuanto más se canta, más se llora. Hay un momento en que tanta exaltación de la patria en los símbolos puede llevar a la tragedia o al drama. De momento, estamos en el drama.

¿Qué cree que puede pasar en Cataluña mañana [por hoy]?

El proceso será largo porque el 155 se puede aplicar de muchas maneras. Creo que a largo plazo prevalecerá el sentido común, Cataluña no se puede independizar, es ilegal, va contra la ley en estas circunstancias; Europa no quiere y el gran capitalismo tampoco, y a la gran mayoría no se le ha consultado. Pero va a quedar mucho rencor, la sociedad catalana está fracturada y muchos jóvenes piensan que esto es democrático, se confunde la democracia de la calle con la democracia de las urnas. Eso es lo que determinaba que era el nazismo el filósofo Carl Schmitt, la democracia por aclamación.

Esos jóvenes se sentirán indignados si se les asocia con planteamientos nazis.

Claro, pero es que no lo han analizado bien, o lo han analizado muy bien los que les están dirigiendo. Es un cúmulo de mentiras lo que cuenta la Generalitat.

Hablamos de un mundo globalizado y cada vez hay más muros y fronteras. ¿Esto irá a más?

Desgraciadamente, la tendencia es esa. Levantamos muros en EE UU, en Ceuta y Melilla, con los refugiados en el Este. Estamos convirtiendo el mundo en una celda, en departamentos estancos, el mundo se ha vuelto muy egoísta. ¿Cómo se puede tildar de progresista levantar muros? Y es absurdo porque ¿qué es ser catalán, como dice Junqueras? Si está demostrado científicamente que la raza humana es una. ¡Venga hombre!

¿Le queda alguna parte del mundo por ver?

Muchísimas. Me gustaría hacer un viaje largo por México pero no sé si me dará tiempo ya ni si las circunstancias me lo permitirán porque es un país muy peligroso. Ya me he metido sin querer en muchos charcos y mi tope de aventuras está casi cubierto.

¿Algün libro próximamente?

Sacaré uno en mayo de dos viajes que hice por los mares Ártico y Antártico. Viajes polares.

Lo último en INF+

Compartir el artículo

stats