Después de once años en cartel en el West End de Londres y cuatro años en Broadway, Billy Elliot El Musical llega a España en una ambiciosa producción que convertirá a Madrid en una de las escasas ciudades del mundo donde se podrá ver el musical. SON Produce (creadora de Cabaret, Priscilla en el desierto o Sonrisas y Lágrimas) es la responsable de poner en escena este espectáculo dirigido por David Serrano que se estrena hoy en el Nuevo Teatro Alcalá de Madrid tras dos años de trabajo de un equipo de 180 personas.
La producción, que cuenta con 60 niños de 6 a 16 años para los diversos papeles (seis de ellos interpretan a Billy), creó ex profeso una escuela de danza hace año y medio para formar a los jóvenes junto a Víctor Ullate y adiestrarles también en técnicas de interpretación, claqué o canto. Todos ellos, arropados por un elenco de actores encabezados por Natalia Millán, Carlos Hipólito, Adrián Lastra o Mamen García para llevar al musical esta historia en la que un niño de una pequeña localidad del norte de Inglaterra en pleno conflicto minero lucha por cumplir su sueño de convertirse en bailarín.
El musical, que ha sido creado por el mismo equipo que la popular película de Stephen Daldry, cuenta con la partitura de Elton John, que ha transformado la música sobre el escenario.
Con cinco millones de euros invertidos y la complejidad técnica y artística de montar este espectáculo, esta es una de las mayores producciones musicales llevadas a cabo en España que no podrá salir de gira al contar con niños como personajes principales y que prevé estar en cartel alrededor de dos años.
Billy Elliot es «una catarata constante de emociones», según sus productores ejecutivos, Marcos Cámara y Juan José Rivero, para quienes este musical marca «un antes y un después» porque abre en Madrid «un nuevo capítulo a nivel de posicionamiento» como ciudad en la que disfrutar de «buen teatro musical».
El papel protagonista, el de ese adolescente que lucha por hacer realidad sus sueños después de descubrir su pasión por el baile, lo interpretarán los bailarines infantiles Pablo Bravo; Pau Gimeno; Cristian López; Miguel Millán; Oscar Pérez y Diego Rey. Una vez comenzadas las representaciones, todos esos niños con tanto «potencial y disciplina», según Rivero, continuarán con la formación que ya iniciaron en la «Escuela Billy Elliot» donde aprenden nuevas técnicas de danza clásica, claqué, acrobacias, canto e interpretación junto a Ullate.
El Teatro Alcalá de Madrid ha tenido que ser remodelado de manera específica para acoger la representación, ya que era necesario instalar algunos sistemas de elevación y «hacer excavaciones» que requerían de una reestructuración de la caja escénica. La casa de la familia Elliot se ha construido según los planos de las viviendas de las colonias mineras que ocupaban el condado de Durham en los años 80 al noroeste de Inglaterra.
