El Festival Internacional de Cine Pequeño de Aspe inició ayer su cuarta edición en la que se proyectarán 45 cortometrajes internacionales en el Auditorio Alfredo Kraus. Durante cinco días, hasta el 15 de agosto, se mostrarán las obras de ficción, documental y animación seleccionadas entre las 1.225 obras inscritas en el certamen, un 40% que en la anterior edición.

Algunas de las películas que se exhibirán serán estreno nacional y otras, provincial, como es el caso del documental dirigido por la actriz Penélope Cruz titulado Soy Unoentrecienmil. Otro de los grandes nombres del cine español que repite un año más es Javier Fesser con su cortometraje 17 años juntos.

Este año, en el último día, se proyectará el cortometraje realizado por los alumnos y alumnas del taller de creación de cine documental y no-ficción, que se llevó a cabo en el mes de mayo como actividad paralela y previa al festival. La obra, La movida aspense, se adentra en los grupos musicales locales que se formaron en las décadas de los 80 y 90.

En la sección de cine local compiten otros cuatro cortometrajes realizados o participados por vecinos de Aspe (A sangre, de María Boronat; Colores, de Arly Jones y Sami Natsheh; Fredo, de Salva Feltrer y Alvar B. Scriche y Mamá, quiero ser Youtuber, de Manu Mateo).

El horario de las proyecciones será a las 22 horas. Se puede consultar la programación en www.festivaldecinepequeño.es.