¿Cuál es su nuevo sueño?

Mi sueño sería llevarme como si fuera el flautista de Hamelín a los jovenes músicos por todo el mundo.

A los seis años empezó a tocar la flauta, ¿por qué se pasó a la gaita?

Es un instrumento muy íntimo que empecé a tocar de niño en la escuela pero enseguida me pasé a la gaita porque era el instrumento más fuerte en Galicia. Lo que me enamoró de la gaita fue su energía. La flauta es el amor platónico y la gaita es el amor más carnal, más sexual.

¿Qué le falta para conquistar al rey de lo celta?

En estos momentos, lo más interesante sería la aportación hispánica a la música celta. En los últimos 20 años hemos explorado todas las conexiones pero ahora hay una gran novedad en el horizonte y es que las músicas hispánicas entren en la celta y la revolucionen. Cuando nos escuchan en grandes festivales celtas, perciben sol y energía. Nuestra música es pura fusión. Es nuestro don.

¿En qué momento se encuentra la música celta en España?

España tiene una gran crisis de identidad porque tiene una falta de autoestima por sus tradiciones total. Uno nota que las instituciones públicas y las privadas apoyan géneros como el rock, el indie o la música clásica pero todo lo que es nuestro bagaje cultural ya se encarga la madre naturaleza de mantenerlo. Me parece injusto pero creo que la injusticia tiene una energía potencial muy grande para que se produzca una reacción total. Muchos jóvenes ya no se creen aquello de que para ser moderno hay que copiar lo americano y saben valorar el tesoro que tenemos. Hay que apoyar a esos jóvenes porque tienen mucho que decir pero no saben cómo vender lo suyo y la música celta puede ser una gran plataforma.

¿Por eso se los lleva de gira?

Tienen ilusión pero esta nueva generación es consciente de que nadie les va ayudar. Podemos hacer cosas maravillosas. Ir de gira por el mundo con profesionales es una gran oportunidad porque uno ve los secretos de la música desde dentro. Es lo que me ocurrió cuando con 18 años empecé a girar con The Chiefteins. Lo hacemos continuamente con gente joven y cuando termina la gira, de repente, tienen trabajo.

¿La música celta se valora más fuera de España?

La música celta se valora en muchos países porque se la conoce a través del cine, pero lo que es desconocido es la música celta hispánica. Cuando emigraron a Latinoamérica, en esta cultura hispánica había música celta. El primer instrumento que sonó en los países latinoamericanos fue la gaita. El alma de la gaita está dentro de la música de Latinoamérica, tenemos que reivindicar la música celta latinoamericana igual que los irlandeses han reivindicado la música celta en norteamérica.

¿Hay nuevo disco en el horizonte?

Sí, cada disco me lleva tres años y en el horizonte hay muchas ideas pero hasta Navidades no habrá novedades.