El Festival de Cine de Alicante se despide hoy con el fallo del jurado y la concesión de premios en los jardines de la Diputación en un acto en el que también se entregará el galardón de Música para la Imagen a Juan Bardem. El jurado, que este año preside el compositor Luis Ivars, tendrá que decidir qué película se alza con la Tesela de Oro al mejor largometraje entre los seis candidatos: un thriller de denuncia social (Inocente), un drama poético ( El collar de sal) y cuatro comedias con sus diferentes estilos ( Selfie, Blue Rai, Como la espuma y El intercambio).

Esta última, El intercambio, puso fin ayer a la proyección de largometrajes de la sección oficial, con la presencia de su director, Ignacio Nacho; la actriz Natalia Roig y el productor Dylan Moreno. El equipo visitó ayer este diario antes de la proyección para explicar esta comedia «claustrofóbica con tintes de thriller y cómica», según el responsable de esta producción malagueña protagonizada por Pepón Nieto, Natalia Roig, Hugo Silva y Rossy de Palma.

Si Como la espuma tenía como punto de partida la celebración de una orgía, El intercambio, como su propio nombre sugiere, comienza con una cita para un intercambio de parejas. «Esto podía ser el festival de cine erótico de Alicante», bromeó Ignacio Nacho sobre el sexo como excusa para contar historias como la suya, en la que «me parecía interesante incluir el factor sexual, que nos interesa a todos, y darle una connotación divertida».

En la película, la pareja formada por Nieto y Roig se da cuenta al llegar al encuentro con Silva y de Palma que nada es como habían imaginado y la noche se convierte en un ejercicio rocambolesco para intentar huir.

«La velada que prometía ser espectacular se convierte en una encerrona en la que el propio Jaime (Pepón Nieto) se construye su propia trampa», explica Nacho de esta comedia en la que Natalia Roig interpreta «a la candidez personificada» en un guion «bastante feminista porque la que parece más inocentona es a quien la vida luego recompensa».

El intercambio tiene mucho de pieza teatral -de hecho, está de gira por teatros con algunos de sus intérpretes- y el director incide en su predilección por las películas «claustrofóbicas, de pocas localizaciones y pocos personajes para que tengan un poco de épica», tras atribuir todo el mérito de la película a los actores: «O cuentas con actores con mucho oficio o estás perdido» y «afortunadamente, hemos conseguido engañar a un elenco extraordinario sin jamones de por medio».

La actriz Natalia Roig cree que El intercambio es «un soplo de aire fresco» porque su guion es «una gozada» donde el espectador «se puede partir de risa» desde el primer minuto. «Hugo Silva decía que es difícil reírte leyendo un guion solo en tu casa y con este pasa -explicó- porque hay diálogos y frases que parecen de Buñuel, con tintes surrealistas, que recuerdan a Becket o a Ionesco».

Ignacio Nacho desea que el público asista a la película «sin prejuicios y con la sana intención de pasarlo bien. El cine es como una cebolla con muchas capas y quedándose solo en la superficie está más que amortizada la entrada».

Tras su presentación en el Festival de Cine de Málaga, sin entrar a concurso, esta es la primera vez que compite en un festival. Su estreno en cines está previsto para el próximo otoño, apunta el productor, Dylan Moreno, que cuenta que tendrá distribución nacional e internacional.

Ayer también se proyectó como película invitada La noche que una becaria encontró a Emiliano Revilla, de Luis María Fernández, con la presencia de los periodistas Jesús Álvarez y Mª José Sáez.