La Academia Sueca entrega este fin de semana en Estocolmo al cantautor Bob Dylan el diploma y la medalla del Nobel de Literatura, un galardón que el estadounidense no recogió en la ceremonia oficial de los premios y que recibirá finalmente fuera de los focos de las cámaras. La entrega, aprovechando los dos conciertos que tiene este fin de semana en la capital sueca, pone fin a meses de intriga, aunque no se ha informado oficialmente de cuándo, cómo y dónde tendrá lugar. El penúltimo episodio del culebrón tuvo lugar el martes, cuando la secretaria permanente de la Academia, Sara Danius, informó en su blog de que no habían hablado con el músico en los últimos meses y recordaba que la conferencia de recepción del premio debía celebrarse a más tardar el 10 de junio. Sin ella, según los Estatutos de la Fundación Nobel, no se podían cobrar los 8 millones de coronas suecas (900.000 dólares) con que está dotado el galardón. El plazo para esa conferencia era de seis meses a partir del 10 de diciembre, fecha el año pasado de la ceremonia de entrega de los premios, que tuvo lugar sin Dylan. Finalmente se han conocido los conciertos de Dylan en Estocolmo, y el encuentro «pequeño e íntimo» sin presencia de los medios de comunicación.