El escritor noruego Jo Nesbo participó ayer en el Festival Kosmopolis en el Centre de Cultura Contemporània de Barcelona (CCCB), donde acude con la serie Occupied -ideada por el autor-, y afirmó: «Mi trabajo es explicar cuentos de hadas para adultos».

En rueda de prensa, Nesbo presentó la novela La sed (Roja&Negra/Proa), lanzada mundialmente el martes de la mano de su detective Harry Hole, que tiene como protagonista a un asesino en serie que absorbe la sangre de sus víctimas, al que el detective quiere dar caza para calmar, a su vez, la sed de no haberlo podido atrapar antes.

Esta novela empezó en una sala de psiquiatría, donde conoció el Síndrome del Vampirismo Clínico sobre la necesidad de beber sangre de animales, la propia o la de otras personas, incluso la pareja, de modo que estos pacientes atacan a otras personas para bebérsela.

«Empecé a investigar y había muchos asesinos en serie famosos», dijo el autor, que explicó que en la novela pone a Hole a escoger entre seguir su vida con Rachel o acudir a su deber, lo que le sucede a muchos soldados de Afganistán tras años de guerra y a los astronautas tras participar en largas misiones espaciales.

A su juicio, la novela versa en el fondo en el sentido del deber y el hecho de «colocar nuestra vida en un contexto mucho más amplio», en un reflejo social sobre la sociedad, que es llamada para misiones para las que es adecuada.

Asimismo, señaló que si los asesinos tienen una sed de matar que satisfacer, buscando siempre cometer otro crimen, en el caso de Harry Hole, cuando encuentra a un asesino «quiere más, y eso lo empuja a seguir».

Nesbo apuntó que no se puede escribir sobre el odio si no hay amor, y los únicos temas sobre los que versan los libros es sobre la condición humana, y en realidad todas sus historias son de amor.

«Harry se parece cada vez más a sus asesinos a lo largo de toda la serie», dij el escritor, que comparó al jugador del FC Barcelona Luis Suárez a su detective, asegurando que el futbolista es tramposo y es un poco como el investigador, ya que a los dos es difícil felicitarlos, especialmente después del penalti del partido del FC Barcelona y el Paris Saint Germain.

Nesbo ve en la novela impresa un montón de páginas que reflejan sus dos últimos años de vida: «Para mí, el proceso de escribir es cuando tengo la sinopsis».