Miguel Bosé está a punto de iniciar su gira con MTV Unplugged, una revisión acústica de temas que ha hecho en 40 años de carrera, y que está «pegada» a las anteriores, Estaré y Amotour: «en el mundo de la música no paras, pase lo que pase. Nunca para esa actividad, que es muy saludable y muy bendita». El cantante (Panamá, 1956) respondía así a una de las cuatro preguntas que ha contestado en los 10 minutos concedidos a EFE dentro del marató" de entrevistas que encajó ayer en medio de los ensayos en Madrid de MTV Unplugged, que arranca en México el día 16. La cuestión formulada era si con esta gira, que llega pocos días después de que «se fuera» una de las personas esenciales de su vida, su sobrina Bimba, sigue, como él mismo ha dicho, «más aéreo que submarino·. Su respuesta, la de la «bendita actividad» que «nunca para, pase lo que pase», fue la única alusión a su momento anímico, dado que el pacto previo era no preguntarle nada que tuviera relación con el fallecimiento.

Está seguro de que la gira con los temas de un disco que grabó el 12 de mayo de 2016 en Ciudad de México, producido por Nicolás Sorín y con dos canciones inéditas -Dime qué diré y Estaré-, va a ser sorprendente. Y lo será, detalla, porque llega a los 40 años de carrera -Linda es de 1977- con una producción totalmente nueva en todos los sentidos, porque, describe, siempre se ha rodeado de alta tecnología.

«Esto es volver a los orígenes de los espectáculos, a lo orgánico. Tratando con tantos contenidos nos olvidamos de algo tan esencial como las luces y este año estamos apostando mucho por eso, en un escenario de seis niveles, tres pantallas de fondo con realización en circuito cerrado...», relata. Además son todos materiales de nueva generación con los que aún están experimentando y con posibilidades «inmensas», dice satisfecho. Se le han quitado, confiesa, «todos los miedos» que tenía a salir de su zona de confort, la de los ordenadores, la de la tecnología, en la que reside «el sonido Bosé», y enfrentarse a una guitarra.

«He visto unas posibilidades espectaculares. Hay temas, con sonidos muy específicos, que no funcionaban en acústico, porque una guitarra acústica no suena como su equivalente informático. Me gusta la mano humana. Hay tanta diferencia como entre la Filarmónica de Berlín o el dj David Ghetta. Las emociones son distintas», asegura el artista.

El núcleo de la gira es el disco MTV, compuesto por temas como Bambú, Morenamía, Amante Bandido, Amiga o Nada particular. Esta última es una canción de 1992 sobre la guerra de Yugoslavia, en la que originalmente, subraya mientras la entona, «había mucho lirismo», y era «muy grande» -6 minutos 10 segundos-.