Artista, ensayista, poeta... Eduardo Lastres afronta sus dudas, sus pensamientos, sus preguntas y se da respuesta, pero lo hace transmutado en Don Quijote, máscara tras la que se agazapa para escucharse a sí mismo y hacer universales sus interrogantes. El resultado de esas preguntas con respuesta es Bien sabes, Sancho amigo, primeras palabras que dirige el caballero a su escudero y título del libro de pensamientos y reflexiones que el artista empezó a escribir de forma asidua para escucharse a sí mismo. Y lo hizo, poniendo la voz de Quijote en un diálogo ficticio con su querido Sancho.

Primero los colgó en Facebook, como una especie de píldoras dosificadas con las que encontraba mejoría. Y del mundo virtual salta ahora al mundo tangible, al del libro de papel que toma forma gracias a la editorial Aguaclara, que recoge unas 185 reflexiones de las más de 500 que Lastres fue creando -y aún sigue haciéndolo- con efecto terapéutico.

«Me preguntas, mi buen Sancho, qué se puede hacer con aquellos que creen saberlo todo y manifiestan con verborrea su ignorancia. Y yo te digo, Sancho, que aquel que cree saberlo todo es, sin dudarlo, un necio». Una muestra del aire de este volumen que hizo confundir a muchos al pensar que se trataban de reflexiones del propio Quijote. «El amor, la muerte, la vida... son las eternas cuestiones y yo las recojo como respuestas a preguntas que me hago a mí mismo, pero como si fuera Sancho quien pregunta a Don Quijote», afirma el autor, que se empapó de esta novela universal leyendo una edición del siglo XVIII, herencia de uno de sus abuelos.

De esta forma entabla un juego entre personajes y un juego entre la realidad y la ficción «disfrazado» de Quijote. «Cuando quería criticar cosas que me estaban ocurriendo, al hacerlo de esta manera, disfrazándome de Quijote, de alguna manera era como una protección». Críticas e interrogantes que surgen «un poco en situaciones extrañas y a través de ellas expresas las reflexiones que me hago sobre la vida», destaca. Y si hay que definir el libro, para que el lector sepa a qué atenerse, el autor lo definiría como «reflexiones de una persona del siglo XXI pero expresándolo como una persona del siglo XV... pero qué más da, tenemos las mismas dudas». Sencillo, directo y «muy legible», afirma. «Lo puedes abrir por cualquier parte porque son textos cortos y eso hace que sea un libro ameno».

Será el próximo día 27, en la Sede Ciudad de la UA en Alicante, cuando todos podrán conocer este Bien sabes, Sancho amigo. Acompañarán al autor Emilio Soler, que será el encargado de hacer la presentación, y Luis T. Bonmatí, editor de Aguaclara y autor del prólogo.

Precisamente en ese texto dice: «No es imposible que Eduardo Lastres esté presentándose disfrazado y diciéndose las cosas a su propio oído para entenderlas -y entenderse- mejor».