Son más de un centenar de textos teatrales los que ayer ocuparon el suelo del Teatro Principal de Valencia, en una acción con la que los dramaturgos de la Comunidad Valenciana quisieron dejarse ver, ante una administración que consideran no ha realizado históricamente ninguna apuesta por la producción y exhibicón de la dramaturgia valenciana.
La Asociación Valenciana de Escritoras y Escritores Teatrales, que preside Paco Sanguino, director del Principal de Alicante, encabezó esa iniciativa que culminó con la entrega al responsable de artes escénicas de CulturArts, Manel Chaques, de un decálogo de reivindicaciones, convirtiendo esta acción en algo histórico con el objetivo de que se ponga en marcha una polìtica «para el fomento y el sustrato sobre el que se ha de sostener la dramaturgia valenciana porque no ha existido ninguna en 30 años», destacaSanguino.
Entre estas peticiones, se apunta la internacionalización de los textos a través de traducciones; presupuesto y condiciones de trabajo dignas para la producción de textos de autores actuales; compromiso de exhibición de las producciones como mínimo en los teatros públicos de las tres provincias; o que las ayudas sean a proyectos de escritura y no a obras acabadas, con el compromiso de producirlos.
Detrás de esta iniciativa, figuran nombres como Rodolf Sirera, Paco Zarzoso, Lola Blasco, Juli Disla, Gabi Ochoa o Eva Zapico.
