Después de la inesperada muerte de Carrie Fisher, Disney podría obtener una indemnización por 50 millones de dólares provenientes de la póliza de seguros de la actriz, quien falleció el 27 de diciembre, según New York Post. En la póliza de seguros de vida de la actriz se dice que la dueña de los derechos de las películas de Star Wars recibiría esa cantidad en caso de que la actriz se tuviera que ausentar o se viera impedida en concluir alguna de las tres películas que realizaría. Fisher dio vida a la princesa Leia en las cintas Star Wars de George Lucas desde 1977, y había firmado un contrato por una entrega de tres películas más. La primera fue El despertar de la fuerza, que se estrenó en 2015, la cual recaudó más de dos billones de dólares en taquilla. La filmación del Episodio VIII, que se estrenará en las Navidades de 2017, ya estaba concluido en el momento en que sucedió la pérdida, sin embargo, aún quedaba pendiente el rodaje de la última entrega del contrato. Ahora los escritores de la saga se verán obligados a reescribir el guión de la cinta, mientras tanto Disney no se ha pronunciado sobre esa posible indemnización.

La cantante estadounidense Mariah Carey despidió el año con una accidentada actuación en la plaza Times Square de Nueva York en la que los problemas técnicos con el sonido terminaron convirtiendo el momento en un gran fiasco. «Son cosas que pasan. Que todos tengan un feliz y saludable año nuevo. Seguiré dando más titulares en 2017», aseguró Carey en un mensaje en Twitter poco después de su accidentada actuación, junto a un vídeo con una de sus características muecas. Los problemas de sonido empezaron a dejar en evidencia que la diva estaba interpretando con sonido pregrabado uno de sus grandes éxitos, Emotions, y entonces se puso a pasear por el escenario y hasta llegó a pedir a la audiencia que cantara por ella.

«Ha sido maravilloso», se limitó a decir la ganadora de varios Grammy nada más terminar su primera actuación, que dio paso a un segundo tema, We Belong Together, también con sonido pregrabado y su salida del escenario visiblemente molesta.

Un espectáculo circense inauguró ayer en Logroño, el Festival Escenario de Culturas Contemporáneas Actual 2017, que, durante siete días, convertirá a la capital riojana en centro de la cultura. El festival llega este año a su vigésimo séptima edición con una programación ya asentada, en la que la música es la gran protagonista, con conciertos de gran formato, como los de Amaral o Love of Lesbian, y otros en salas pequeñas, recitales más íntimos y el concurso Guerra de bandas. Un total de 38 grupos y nueve pinchadiscos actuarán en siete escenarios, donde presentarán sus propuestas de rock, pop, metal, folk, soul, hip-hop y mestizaje durante el festival, organizado por el Gobierno de La Rioja y el Ayuntamiento.