La sala de exposiciones de la Diputación acoge hasta el 16 de noviembre la muestra "La radio del pasado: La Colección de Antonio Ferrández en Benejúzar", una selección de veinte receptores fabricados en diferentes países entre 1922 y 1960, reparados por su propietario.

La exposición repasa, a través de un recorrido estructurado, diferentes artilugios radiofónicos, desde el más antiguo, una radio Majestic MD 50, con el clásico mueble de madera, a la más vanguardista, la Motorola HS-821, diseñada en plástico. Estos dos instrumentos abren y cierran la exposición y, junto con el resto de los que se exhiben, descubren al visitante la evolución de este invento que revolucionó el mundo.

La veintena de aparatos procede del Museo de Radio Benejúzar, espacio que alberga la colección privada de Antonio Ferrández, un emprendedor y autodidacta, apasionado de la radio desde los 14 años, época en que realizó un curso de reparación de aparatos radiofónicos que le abriría las puertas a este mundo. En la década de los 50 crea la emisora local Radio Benejúzar de forma experimental y poco después se dedica de forma profesional a la construcción, reparación y venta de este instrumento.

Ferrández ha comentado en la inauguración de la muestra que "lo que veis aquí es una pequeña parte de mi colección personal formada por más de 400 aparatos que he ido recopilando, restaurando y reparando durante prácticamente toda mi vida".

El diputado de Cultura, César Augusto Asencio, ha destacado que "la exposición incluye clásicos antiguos de la radio a través de un itinerario temporal y técnico, con curiosidades como aparatos que se trucaban en la época de la dictadura nazi, donde solamente se podía acceder a determinadas emisoras".