Antes de iniciar la entrevista, la actriz Terele Pávez se disculpa porque ha sufrido un «latigazo» cervical y le cuesta moverse. Pero cuando empieza a hablar cuesta pararla y tanto defiende a Álex de la Iglesia, a quien «parece que ahora todo el mundo cuestiona», como critica a Mariano Rajoy.

Pávez comenta que se desplazó hasta el Festival de Cine Fantástico de Sitges ante el estreno del documental Herederos de la bestia, una cinta en la que se reivindica la película de Álex de la Iglesia El día de la bestia, de 1995, como el punto de inflexión del género fantástico español.

Ella fue allí Rosario, la madre del personaje que interpretaba Santiago Segura, una mujer con foto de Tejero en su casa, y dice que todavía ahora hay gente que la detiene por la calle para hablarle de ese papel, que volvió a ponerla en el candelero, después del éxito que ya había tenido en 1984 con la Régula de Los santos inocentes, de Mario Camus.

«Álex contactó conmigo en un momento en el que yo no trabajaba y nos caímos bien desde el principio: los dos somos zurdos y de Bilbao y tenemos sentido del humor. Siempre ha sido muy tierno conmigo, pero también es respetuoso con todo el mundo, algo que me gusta, eso es amor para mí», remarcó. Según Pávez, para De la Iglesia, «nadie es más que nadie, todos somos preciosos, y es capaz de saber cuándo hay que tomar un café a tiempo o cuándo hay que hacer un pitillo».

De El día de la bestia aseguró que los actores, cuando acabaron de rodarla, no fueron muy conscientes del «cambio» que supondría para el cine español. «Ahora en cambio, todo el mundo cuestiona a De la Iglesia y parece que quieren que no se vaya a sus películas», apostilló. También guarda muy buen recuerdo de su paso por Los Santos Inocentes y el cariño especial por Paco Rabal. «Yo para él fui su hermana», comentó.