Quedó inédito Manzanares en su primero, de nombre Almendrito, al carecer de opciones ante un toro muy parado de salida y escasísimo de fuerzas y fijeza. Intentó el trasteo con la mano derecha y logrando unos detalles a modo de credencial, pero sin acoplamiento, hasta el punto que fue aplaudido al irse por la espada después de estar porfiando un buen rato. Mató mal y fue avisado.
Recibió a Adulador con el saludo de unas verónicas con gusto y, tras la buena lidia de Rafael Rosa, se lucieron en banderillas Suso y Luis Blázquez, que fueron obligados por el público a desmonterarse junto a Rosa, presagiando la gran faena que llegaría a continuación.
Comenzó la faena sobre el pitón derecho, el que parecía más claro, saliéndose a los medios con el poder y el pellizco que estaban esperando en Sevilla. En esos mismos terrenos prosiguió la faena con la misma mano, cambiándose la muleta a la zurda con un arte que rompió la plaza. Llegó al momento álgido con la mano muy baja y el toreo muy largo, hasta lo antológico.
En la suerte contraria citó a recibir, pinchando, y logrando una estocada caída al segundo intento, quedando el premio en una oreja de muchísima fuerza.
Casi lleno en la Maestranza en tarde calurosa y de enorme expectación en el cierre del abono de la Feria de San Miguel.
En un encierro remendado, se lidiaron toros de doña Olga García Jiménez -primero, segundo y quinto-, don Fernando Sampedro-cuarto- y de los Hermanos García Jiménez -sexto-, después que se hubiesen rechazado en los reconocimientos veterinarios tres de Olga y los Hermanos -titulares del cartel- otro de Sampedro y uno más de Parladé, por falta de trapío los cuatro primeros y por cojera el último.
El primero de la tarde ovacionado en el arrastre, tercero y cuarto aplaudidos de salida.
Abrió el cartel Sebastián Castella que cuajó una trepidante faena al primero de la tarde, cortando dos orejas, y ovacionado en su segundo tras torearlo bien y fallar con la espada. Rozó la Puerta del Príncipe. Cerró plaza López Simón ovacionado en el tercero y aplaudido en el último de la tarde.