La Mostra de Venecia acogió ayer los dos primeros episodios de la serie de Paolo Sorrentino The Young Pope (El papa joven), la historia de un pontífice imaginario y atípico que arrancó la risa del público que asistió a su estreno. El actor Jude Law es el encargado de encarnar a Pio XIII, el primer papa estadounidense de la historia de una Iglesia que quiere cambiar desde sus cimientos, implantando un férreo conservadurismo religioso alejado de personalismos y centrado únicamente en Dios.

Para esta misión cuenta a su lado con «Sor Mary» (Diane Keaton), una monja que le acogió cuando era niño, y con el maestro ceremoniero del Vaticano, el cardenal Gutiérrez, interpretado por Javier Cámara. Toda esta historia está relatada con el modo metódico de Sorrentino, Óscar por La Grande Bellezza (2013), y desde un punto de vista sarcástico que suscitó las carcajadas del público en diferentes ocasiones.