La disco resplandece, el último cortometraje rodado por el cineasta alicantino Chema García Ibarra con adolescentes de la Vega Baja, se presentará en el próximo Festival de Cine de San Sebastián, que se celebra del 16 al 24 de septiembre.

El festival donostiarra ha seleccionado el nuevo trabajo de García Ibarra (Elche, 1980) para la sección Zabaltegi-Tabakalera, que muestra las propuestas cinematográficas más sorprendentes del año en su primera edición competitiva, por lo que La disco resplandece se medirá con otros 23 títulos, entre cortometrajes y largometrajes, de cineastas como Jim Jarmusch, Jeff Nichols, o Bertrand Tavernier.

El corto de García Ibarra forma parte de la película colectiva internacional In the same garden, una producción turca que aborda las relaciones entre los pueblos turco y armenio desde la óptica de diez cortometrajistas de diferentes países del mundo

La parte española corre a cargo del cineasta ilicitano, que la pasada primavera rodó el grueso de este trabajo, de 12 minutos, en Callosa de Segura con actores no profesionales, una de las señas de identidad de su cine.

El largometraje completo con las diez piezas se estrenará en el Festival de Cine de Sarajevo, que se celebra del 12 al 20 de agosto, pero el corto de García Ibarra por separado se presentará en España durante el Festival de Cine de San Sebastián, un certamen en el que se estrena García Ibarra, que sí ha concursado y cosechado premios en festivales como Sundance, Cannes o la Berlinale con otros cortos.

«La verdad es que no sé cómo se verá el corto fuera del contexto de un largometraje internacional como este, pero se interesaron por él desde San Sebastián al ser el único director español y los productores lo vieron bien, así que me sirve de presentación en España», indica el ilicitano, que añade no haber estado nunca en el escaparate de Zinemaldia «ni siquiera como público, y me parece genial, me apetece mucho y seguro que me encuentro con muchos amigos cineastas y críticos».

La disco resplandece es una ficción con estilo documental, medio naturalista y de ciencia-ficción, a partir de cinco chavales que preparan una noche cualquiera con un coche, alcohol y música.

«En mi corto no pasa casi nada, aparentemente, no hay una trama y no cuento mucho porque si sigo lo cuento entero», explica Chema García. «Es la ficción reducida al mínimo -indica-, con estilo documental pero intentando transmitir o capturar momentos muy naturalistas que están fuera de una trama».

Este cineasta, que rodó su primer corto en el salón de su casa, reconoce que cada vez le gusta más «quitar cosas a las películas, y si yo no muevo la cámara en mis cortos, ni pongo música, ni trabajo con actores, me apetecía también quitar la trama», apunta.

Esta ha sido la primera vez que García Ibarra ha trabajado con un productor detrás y asegura que la experiencia ha sido «muy profesional y muy respetuosa con mi trabajo, vinieron al rodaje un día y me dieron libertad total para contar mi historia».