Las autoridades de Tailandia han advertido de posibles riesgos para la salud y el patrimonio vinculados con la aplicación para móviles Pokémon Go, coincidiendo con su puesta a la venta en este país y otros catorce en la región de Asia-Pacífico.

Niantic, empresa que ha desarrollado la aplicación junto a Nintendo y The Pokémon Company, anunció en su página web que ésta ya estaba disponible para su descarga en 15 nuevos países.

Además de Tailandia, estos incluyen a Brunei, Camboya, Indonesia, Laos, Malasia, Filipinas, Singapur, Vietnam, Taiwán, Papúa Nueva Guinea, Fiji, Islas Salomón, Micronesia y Palau.

El lanzamiento llevó al ministerio de Cultura tailandés a expresar su preocupación por los posibles daños a monumentos históricos que podrían causar los jugadores de la aplicación.

Días antes, el Ministerio de Turismo había mostrado su interés en utilizar Pokémon Go para promocionar varios sitios de interés del país.

Mientras, el portavoz del ministerio de Salud, Yongyuth Wongpiromsan, alertó a través de Twitter del riesgo de adicción que la aplicación puede causar a los usuarios a los que, sin embargo, también alentó a salir a la calle para hacer ejercicio.

En Malasia, la aplicación se puso a la venta un día después de que el comité islámico consultivo para asuntos legales desaconsejara su uso para musulmanes al considerarlo «dañino».

«Puede alentar las ansias de poder y el deseo hacia ídolos de poder. También puede fomentar el juego y las apuestas», indicó uno de los expertos del comité, Zulkifli Mohamad al Bakri, en un comunicado.

Zulkifli también denunció que Pokémon Go puede propiciar la intrusión en la vida privada, accidentes, negligencias y adicción.