Fueron 50.000 objetos los que Paco Huesca donó al Ayuntamiento de Alicante -con contraprestación, como él puntualiza- en 2000. Casi dieciséis años después el coleccionista reclama que se cumplan los compromisos que se pactaron entre ambas partes en el momento de la formalización del acuerdo. Si así fuera, aseguraque donará también su fondo privado, ya sin contraprestación alguna.

Esta nueva colección incluye 1.000 DVD, seis álbumes con programas de mano, tres álbumes de fotografías, 1.000 libros de cine, discos, diez pinturas originales de Sara Montiel, tres álbumes de autógrafos, 25 maniquíes, 500 carteles de cine, fotografías, programas, trofeos y un dibujo original de Rafael Alberti realizado el 23F enlos cines Astoria, entre otros objetos.

Si no se subsanan los incumplimientos del contrato anterior, el ahora director del Festival de Cine de Elche ha dejado por escrito ante notario que, en caso de fallecimiento, su esposa se encargue de vender ese fondo y dedique los beneficios a una asociación privada de protección de animales, «pero quedando excluida, en todo caso, la entidad Protectora Municipal de Animales de Alicante».

Las irregularidades a que se refiere Huesca se centran en que no se catalogó en su totalidad durante los primeros años; que se encuentra en dos lugares diferentes, Las Cigarreras y el Archivo Municipal, incumpliendo que debía estar expuesto al público; que el contrato se hizo mal y tuvo que abonar dos millones de pesetas a la Seguridad Social; que la casa o museo del cine cayó en el olvido o que los 100 cartelones de José Borja no se restauraron y algunos están medio rotos.