Con más de 100.000 visitantes y gracias a la destacada calidad de las galerías participantes y de los artistas presentes «ha aumentado muchísimo el nivel de Arco respecto a ediciones anteriores, lo que nos coloca en otro nivel de las ferias internacionales de arte contemporáneo».

Así lo destacó ayer Carlos Urroz, director del certamen, al cierre del 35 aniversario de ARCO «con unos contenidos que han mejorado mucho tanto en el programa del aniversario como en el general». Todo consecuencia «de un trabajo de un equipo muy grande de gente. Después de seis años, se ve como cada año hemos ido sumando un poco y este es el resultado de seis años de trabajo muy intensos».

El nivel ha subido «pero también la satisfacción de la gente que ha venido a la feria, de los profesionales y coleccionistas, unos 30.000 de todo el mundo, de los visitantes y de las propias galerías».

Unos visitantes que desde tiempo antes de que ayer se permitiera el acceso a los pabellones 7 y 9 de Ifema ya hacían colas y que llenaron por completo galerías, pasillos, restaurantes y los diferentes espacios.