La revista alemana Das Golden Blatt publica que los reyes Felipe VI y Letizia renovaron sus votos matrioniales el pasado mes de diciembre en la paradisíaca isla caribeña de Curazao, colonia holandesa perteneciente a las Antillas Holandesas y situada a pocos kilómetros de la costa de Venezuela. Según la publicación germana, la ceremonia tuvo lugar en una playa privada en la que los únicos testigos presentes fueron sus dos hijas, la princesa Leonor y la infanta Sofía, y se celebró «al estilo americano, sobre la arena blanca y cerca de las olas del mar».

El Rey, como ya hizo en el primer enlace en la Almudena, le entregó a su esposa un anillo de diamantes, ante lo que ella no pudo contenerse y derramó unas lágrimas, emocionada, señala Das Golden Blatt. La Reina guarda recelosamente la joya en su joyero, afirma el medio alemán, y tan sólo la utiliza en eventos privados.