El papa Francisco denunció ayer que «los cristianos son perseguidos a menudo con el silencio vergonzoso de muchos» en un mensaje en su cuenta de la red social Twitter y en ocasión de la celebración de San Esteban, primer mártir de la Iglesia católica.

La festividad de San Esteban fue el tema que posteriormente afrontó en su reflexión durante el rezo del Angelus y recordó que tanto Jesús como San Esteban pidieron perdón para los demás.

«El perdón, como dice la misma palabra, es la expresión más alta del don», agregó el pontífice.

Francisco también se refirió a que es horrible «vivir con el rencor» y por tanto invitó a «vencer el mal con el bien y transformar el odio en amor y hacer así mas limpio el mundo».

Para ello, el pontífice argentino explicó que «se puede afrontar con la oración el resentimiento y confiar a quien nos ha hecho daño a la misericordia de Dios».

Francisco aprovechó para agradecer las numerosas felicitaciones y muestras de cariño venidas de todo el mundo.