El Gobierno aprobó ayer en el Consejo de Ministros el Real Decreto que desarrolla la reforma de la Ley de Cine, que incluye, entre otros aspectos, la modificación del sistema de ayudas a la cinematografía, que ahora se otorgarán a priori. Según la vicepresidente, Soraya Sáenz de Santamaría, serán «ayudas generales y anticipadas», de manera que se cambia la financiación del momento después de que haya hecho la película a una financiación previa. Será asignada en función de «criterios objetivos» y además será pagada «progresivamente», con posibilidad de reembolso en función de resultados comerciales y además se emplearán las ayudas a las «películas con mayor impacto cultural». También se simplifica la calificación por edades al establecer una única calificación para la distribución de la película en cualquier soporte. Hasta ahora era necesario solicitar un nuevo certificado para la distribución en vídeo.

Además, ayer el Tribunal Supremo sancionó a las cinco grandes distribuidoras de cine, Sony Pictures, Warner Sogefilms, Hispano Foxfilm, United International Pictures y Walt Disney Company Iberia, por acordar políticas comerciales para repartirse parte del mercado español.